Canarias entra en emergencia tecnológica: cómo pueden reclamar los afectados por la caída del sistema

Santa Cruz de Tenerife

Canarias entra en emergencia tecnológica. El Consejo de Gobierno aprobó este lunes la declaración, vigente hasta el 31 de diciembre, tras comprobar la existencia de una avería que ha afectado a 1.250 de los 5.000 servidores virtuales de la comunidad autónoma. Fue el pasado 24 de junio cuando se detectó el fallo originario en una base de datos que provocó daños en cascada. El día 25 empezaron a recuperarse los sistemas. Sin embargo, a lo largo del proceso volvió a producirse una caída que reflejó la dimensión del incidente.

La directora general de Transformación Digital de los Servicios Públicos ha asegurado que actualmente los sistemas están funcionando en buena parte, pero no de forma estable. En consecuencia, se producen fallos intermitentes que afectan a los empleados públicos, por ejemplo con sus correos, y también a los ciudadanos que deben realizar trámites a través de la sede electrónica. "El objetivo ahora mismo es recuperar lo que no se haya podido recuperar pero, sobre todo, darle estabilidad", indica Guadalupe González Taño.

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Qué pueden hacer los ciudadanos

En caso de no poder presentar telemáticamente las solicitudes pertinentes, el Gobierno de Canarias pide a la ciudadanía "poner una queja o reclamación" y contactar llamando al 012 o a través de los correos habilitados (el propio de la sede electrónica o el de información y atención a la ciudadanía). "Ocurrió con alguna ayuda o subvención que finalizaba su plazo justo el 24 o 25 de junio. Se informó por parte de las direcciones generales que tramitaban esas prestaciones y se ha ampliado el plazo", explica la directora.

Qué implica la emergencia

La emergencia tecnológica es una medida excepcional con la que se podrá agilizar la puesta en marcha de actuaciones que refuercen el sistema informático autonómico según ha detallado el ejecutivo. A lo largo de los próximos seis meses se tendrán que aplicar mejoras en la seguridad, la capacidad de respuesta, la eficiencia operativa y la calidad de la atención digital que se presta a la ciudadanía. Sobre todo, permite realizar contrataciones de urgencia. "Si nos encontramos con que de repente no logramos que se recuperen muchos de los servidores, tenemos que sustituirlo rápidamente", señala Taño.

En este sentido, la administración podrá pactar con el "contratista que considere que es el más adecuado para prestar el servicio". Preguntada sobre las condiciones de estos contratos de emergencia, admite que "cuando no tengamos más opción iremos a un solo contratista". No obstante, asevera que intentará contar con varias propuestas y que, en cualquier caso, se adjudicarán las prestaciones a las empresas que ofrezcan mayores garantías.

"Este es un mundo en el que los prestadores son limitados, no hay muchísimos", concluye la directora añadiendo que los acuerdos estarán avalados por informes técnicos y jurídicos: "Es más parecido a lo que se suele hacer cuando hay un incendio. Se necesitan servicios de forma inmediata y se contacta con proveedores cercanos que conoces".