Trama de las carreteras de Cantabria: la investigación detecta pagos en 2015 y 2016 a la mujer del jefe de Servicio por casi 70.000 euros
Las diligencias del Juzgado que instruye la causa evidencian que Miguel Ángel Díez utilizaba a su esposa a y su hija mayor para recibir los pagos de las empresas involucradas en la adjudicación fraudulenta de contratos en la Consejería de Obras Públicas
Santander
La Cadena SER ha tenido acceso a las diligencias previas llevadas a cabo por la titular del Juzgado de Instrucción Número 5 de Santander, encargada de la investigación de la presunta trama de adjudicación fraudulenta de contratos públicos en la Consejería de Obras Públicas y Ordenación del Territorio del Gobierno de Cantabria a cambio de mordidas.
La instrucción del caso arroja novedades relevantes. Entre ellas los pagos que se han detectado ya en los años 2015 y 2016. Pagos que llevó a cabo una de las empresas implicadas, la constructora Rucecan.
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Se trata de un pago de 50.973,16 euros en concepto de “percepciones del trabajo” durante el año 2015. Pago que hizo la constructora a la esposa del jefe de Servicio, Beatriz del Río.
En 2016 se produce un segundo pago desde Rucecan, por importe de 18.818 euros. En total, la mujer de Miguel Ángel Díez recibió 69.791,42 en tan solo dos ejercicios.
Cabe recordar que Beatriz del Río figura también como asalariada en la empresa La Encina, otra de las firmas implicadas. En este caso, estuvo contratada entre los años 2019 y 2022 y percibió, sin que conste ningún tipo de actividad laboral real, un total de 70.482 euros.
Pagos indirectos al jefe de Servicio
La instrucción de la causa pone de manifiesto que el beneficio conseguido por Miguel Ángel Díez de las empresas con las que concertaba la adjudicación de contratos públicos se realizaba forma indirecta.
Es decir, los investigadores sostienen que ha quedado "patente" que el jefe de Servicio se habría beneficiado de fondos cuyo origen está en las mercantiles Rucecan, La Encina y Cannor a través de pagos a su esposa y a su hija mayor.
Nunca han sido pagos directos al propio funcionario, siempre a través de Parivana Lagani, la sociedad creada por la familia para hacer fotocopias, y de pagos la cuenta corriente de su hija.
En total, estamos hablando de una cantidad de 504.000 euros en pagos directos a la familia Díez del Río desde las sociedades mercantiles implicadas.
Miguel Ángel Díez también se beneficiaría indirectamente de la nómina abonada a su mujer en la Encina y en Rucecan. Y recibirá de la otra empresa involucrada, Api Movilidad, un pago en especie a través del renting de un Volvo XC40.
Según la jueza, los pagos realizados a la empresa de fotocopias familiar y a la hija mayor del funcionario “constituyen realmente pagos por las conductas” realizadas por Miguel Ángel Díez Barrio por las que favorecía a unos licitadores frente a otros a la hora de concurrir a determinados expedientes de licitación pública.
Expedientes sobre los que el jefe de Servicio de Carreteras ejercía el control.
Simulaban pagos lícitos
La instrucción también acredita que el funcionario, que está en prisión preventiva en El Dueso desde el viernes, trató de dar un carácter lítico estos pagos.
Para ello creó la sociedad de las fotocopias y para ello su mujer estuvo a sueldo de las empresas implicadas: para simular, dice la jueza, que los ingresos familiares proceden de actividades mercantiles y laborales reales.
Fermín Mier
Formado en Ciencias de la Comunicación en la...