El alma del bosque: la resina y la industria resinera de Cuenca en la historia
Desde los procesos a los oficios relacionados, pasando por las zonas resineras y los métodos antiguos de resinación
El alma del bosque: la resina y la industria resinera de Cuenca a lo largo del tiempo
Cuenca
En el espacio La Memoria de la Tierra que coordina Eduardo Bollo, miembro de la empresa conquense Vestal Etnografía y de la asociación cultural Los Ojos del Júcar, y que emitimos los miércoles cada quince días en Hoy por Hoy Cuenca hemos abordado esta semana la historia de la resina en la provincia con el libro La industria resinera en Cuenca de Antonio Berlanga como informe de cabecera.
¿Qué es la resina?
Es la secreción orgánica de algunas coníferas, en concreto en la provincia de Cuenca, principalmente pinos. “La resina es una defensa contra insectos y patógenos del árbol”, apunta Bollo, “aunque el ser humano la ha aprovechado para distintos usos desde antiguo. Ya en el siglo XIX, con el fomento de la industria química, comienza la resinación como la conocemos actualmente, con el método Hugues”.
El proceso de resinación
“Es un proceso que se mantiene prácticamente igual que hace 150 años”, explica Bollo. “Básicamente consiste en tres partes: la preparación, la obtención de la miera y el trabajo en fábrica”.
La preparación
Más información
Se suele realizar entre el 15 de febrero y el 1 de marzo. El método Hugues establece una resinación a vida, “es decir, se obtiene la resina del pino pero se le deja vivir. Más tarde se cambió, ya en el siglo XX, por el picado de corteza que es muy similar y que se extiende por periodos de 25 años. Consiste en el descortezamiento de roña, abrir la corteza para que el pino resine. Después se coloca la entalladura con una gavia metálica por la que gotea la sabia hasta el pote de barro que la recoge”.
La obtención de la miera
Este proceso se prolonga desde el 1 de marzo al 30 de septiembre “porque se precisa de calor para que sude el pino y escurra la resina. Después llega la remasa, que es pasar la miera de los potes a las latas y de ahí a barriles para llevarlos a la fábrica”, apunta Bollo.
Proceso industrial
“La resina natural contiene un 10% de agua, un 20% de aguarrás y un 30% de colofonía que es la parte más sólida y más importante. Cuando llega a fábrica se limpian las impurezas, se hace una fusión a 751 grados para dejar la mezcla homogénea y después empieza un proceso de decantación y destilación para obtener por un lado la colofonía y por otro el aguarrás de los que se sacan productos como pinturas, ceras, barnices, adhesivos, gomas, cosmética,…”.
Los trabajadores de la resina
Es un sector que, a día de hoy, sigue estando muy masculinizado. Cuberos, resineros, remasadores eran algunos de los oficios. “Hay un caso curioso, el de los cuberos, el carpintero de barriles de madera que, por el trasiego, se rompían constantemente, por lo que su labor era fundamental”, apunta Bollo.
La resina en la provincia de Cuenca
En España destacan los montes resineros de Segovia, pero Cuenca tiene tradición resinera “hasta el punto de que en los años 20 del siglo pasado era la cuarta productora del país y en los 40 ya era la segunda”, explica Bollo. En la provincia destacan distintos puntos como los pinos rodenos de la Serranía Baja en municipios como Pajaroncillo, Valdemoro, Villar del Humo y Boniches. También en torno a Cañizares, Sotos y Mariana o Almodóvar del Pinar.
Paco Auñón
Director y presentador del programa Hoy por Hoy...