'Los celos hacen estrellas': la zarzuela barroca que estrena el Museo del Prado

Cuenca

El Museo del Prado expone estos días la muestra Herrera el Mozo y el Barroco total que se puede ver hasta el 30 de julio. Con motivo de este evento, la Fundación de Amigos el Museo del Prado ha querido recuperar la zarzuela Los celos hacen estrellas (1672), la más antigua de la que se conserva el libreto que escribió Juan Vélez de Guevara y la música de Juan Hidalgo cuya partitura está casi completa. Además, también hay constancia de la escenografía que creó Francisco Herrera el Mozo cuyos bocetos en acuarela se han usado para la nueva puesta en escena.

Para su recuperación y puesta en escena el Instituto Complutense de Ciencias Musicales ha realizado un riguroso proceso de búsqueda e investigación, edición moderna de la partitura (Jesús Fernández Baena ha sido el director musical), y del libreto (la dramaturgia ha corrido a cargo de Sergio Adillo), así como de nuevos materiales de ensayo (Daniela Camacho de Buvle Fashion se ha encargado del vestuario y la plástica escénica).

En Hoy por Hoy Cuenca hemos charlado con Jesús Caballero, director de la compañía conquense La Máquina Real, que ha sido el encargado de la escenografía de este nuevo montaje y del diseño y realización de los títeres porque, sí, esta nueva representación de Los celos hacen estrellas combinará sobre el escenario actores reales y marionetas. “En la representación se verán los manipuladores, los actores y actrices, las tres cantantes y los músicos”, adelanta Caballero, “que comparten interpretación con los propios títeres”.

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‘Los celos hacen estrellas’

Los celos hacen estrellas reelabora en clave de comedia musical la fábula mitológica del acoso de Júpiter a Ío. Incluye “elementos para la diversión cortesana como las trasformaciones mágicas, persecuciones, mamporros, decapitaciones, una corrida de toros, apoteosis final y mucha música”, como se explica en la página web del Museo del Prado.

Esta zarzuela se representó el 2 de febrero de 1673 en el Salón Dorado del Alcázar de Madrid para celebrar el cumpleaños de la regente Mariana de Austria. 350 años después se recrea en un formato más pequeño en el auditorio del Museo del Prado donde se representará, en varios pases, entre el 12 y el 14 de julio.

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“En primer lugar se hizo un proyecto sobre la recuperación de la partitura”, explica Caballero, “pero después, la Fundación de Amigos del Museo del Prado vio la posibilidad de llevar a cabo la zarzuela completa”.

Los actores son alumnos del Máster Universitario en Teatro y Artes Escénicas del Instituto del Teatro de Madrid (ITEM) de la Universidad Complutense de Madrid y alumnas de la Escuela Superior de Canto de Madrid. La música en directo la interpretan miembros del Grupo de Música Antigua (ICCMU) con instrumentos como violas de gamba o guitarras barrocas.

Escenografía en Cuenca

Jesús Caballero lleva varios años afanado en la recuperación de títeres barrocos. En 2020 estrenó en el Festival Internacional de Teatro Clásico de Almagro La selva sin amor de Lope de Vega y tiene un objetivo más amplio de crear un museo de la historia del títere en España.

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Para este proyecto de Los celos hacen estrellas desde la compañía conquense La Máquina Real “hemos montado un pequeño teatro porque el auditorio del Prado es reducido, lo hemos hecho a una escala casi a la mitad de lo que pudo ser el escenario donde se representa la zarzuela”, explica Caballero. “Y como siempre nosotros trabajamos con nuestros queridos títeres barrocos, todo adaptado a esas dimensiones”.

El artista Guillermo Román se ha encargado de recrear en este nuevo teatro de títeres los bocetos originales con los que Herrera el Mozo decoró los laterales y el friso del armazón de madera del escenario.

Para los decorados, también dibujado por el artista barroco, se ha hecho una impresión sobre las acuarelas originales que también se han reproducido en maquetas en la exposición que se puede ver este mes en el propio Museo del Prado.