La construcción del Salto de Villalba: un viaje de 100 años en la historia de Cuenca
En 1924 se intensificaron las obras del embalse de la Toba, el canal y la central hidroeléctrica que se inauguarían dos años después
Salto de Villalba: cien años de una gran obra de ingeniería en la Serranía de Cuenca
Cuenca
En Hoy por Hoy Cuenca hemos retrocedido en el tiempo cien años para contar cómo fue la construcción de la central hidroeléctrica de Villalba de la Sierra, un complejo que se desarrolla desde la presa de La Toba hasta el propio Salto en un tramo de veinte kilómetros siguiendo el curso del río Júcar en su curso alto en plena Serranía de Cuenca. Se trata de una gran obra de ingeniería que sigue en funcionamiento a día de hoy.
Contado por los vecinos
Lo hemos contado charlado con Francisco José Rodríguez Martí, Paco Pepe como le conocen en Cuenca, ciudad en la que ha regentado durante décadas el bar Café Central. Él es el autor del libro ‘De La Toba a Villalba por un canal’ editado por Construcciones Sarrión en 2010 y en el que se recopila una amplia colección de fotografías de los años 20 sobre el proceso de construcción de esta obra de ingeniería.
También hemos charlado con Maite García, vecina de Villalba de la Sierra que vivió con su familia en el poblado del Salto entre 1972 y 1995, periodo de su vida del que guarda bonitos recuerdos.
Gran obra de ingeniería
Todo el complejo fue construido por la Sociedad Eléctrica de Castilla entre 1924 y 1926. El 15 de junio de ese año el propio rey Alfonso XIII inauguró las obras. Entre los ingenieros que firmaron el proyecto destaca Juan Lázaro Urra.
Más información
Según extractos del facsímil El salto de Villalba de la Sierra de Eléctrica de Castilla SA editado por el Colegio de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos en 2023, el conjunto incluye varias estructuras clave. El embalse de La Toba, diseñado para regular el flujo del río Júcar, se proyectó con un volumen de 35 hm³, aunque actualmente solo alcanza 9,7 hm³.
El canal de 20 kilómetros que transporta el agua desde la presa hasta la central hidroeléctrica pasa por la laguna de Uña, cuya capacidad se incrementó significativamente mediante un dique.
El desafío de Royo Frío
Uno de los elementos más impresionantes es el sifón-acueducto de Royo Frío, un viaducto de fábrica con seis arcos y dos tubos de 1,90 m de diámetro, que enfrenta desafíos estructurales, principalmente debido al viento. El canal continúa por el valle, superando la difícil topografía con túneles, acueductos y sifones, y finaliza en un depósito regulador y una cámara de carga.
La central hidroeléctrica, con su sala de máquinas y centro de transformación, está integrada en el paisaje del Júcar. Además, se construyó un poblado para trabajadores y técnicos, con instalaciones como escuela y capilla, siguiendo un estilo historicista.
Paco Auñón
Director y presentador del programa Hoy por Hoy...