Economía y negocios

La producción de Bodegas Fontana ha aumentado un 32 % en blanco y tinto en 2024

En la sección de Vino, Cultura y Gastronomía con la DO Uclés, charlamos con Isabel Hernández, enóloga de Bodegas y Viñedos Fontana, una de las bodegas que forman parte de esta donominación

Entrevista a Isabel Hernández, enóloga de Bodegas y Viñedos Fontana

Tarancón

Desde Fuente de Pedro Naharro (Cuenca), hablamos con Isabel Hernández, enóloga de Bodegas y Viñedos Fontana, para quien la presente campaña de vendimia ha resultado prolongada en el tiempo ya que “empezamos el 11 agosto, con las primeras variedades blancas, son diferentes variedades que maduran pronto algunas, por eso la campaña de vendimia se ha dilatado a lo largo de dos meses y medio, además ha sido lluviosa, como sabemos” y presenta una excelente calidad.

La enóloga de Bodegas Fontana explica el importante papel que desempeñan los viticultores en el proceso, porque “nos traen la uva y no se acaba la vendimia hasta que acaban las fermentaciones alcohólicas o malolácticas” y en esta campaña “a pesar de esas lluvias hemos tenido una excelente respuesta, porque hemos recogido la uva sana, sin botritis, sin atisbo de podredumbre, con lo cual la calidad de los vinos va a ser excelente”.

En cuanto al rendimiento “esta campaña hemos tenido un 32% más de producción en tinto y en blanco, respecto al año pasado que fue lamentable”. Pero además, “como todos sabemos, ha habido una primavera lluviosa y nuestra campaña empieza cuando acaba la anterior. Todo lo que hagamos ahora, la poda, las prácticas culturales, va a determinar la calidad de la uva del año que viene. Desde el punto de vista de la climatología fue bueno el 2023 y eso ha determinado una buena calidad en 2024 y un poquito más de cantidad, comparable a un año medio o ni siquiera, este año no es un año bueno de cantidad, en calidad sí”.

Isabel Hernández reconoce que “las bodegas no somos nadie sin los viticultores, a quienes asesoramos, salimos al campo con ellos, porque cuanto mejor materia prima entre en la bodega, mejor vino se hace”. Para Hernández, “los enólogos hacemos que todo vaya normal pero con una uva en mala situación es imposible hacer buen producto. Ha habido mucha incertidumbre, ha habido muchas precipitaciones en primavera” y eso ha preocupado mucho a los viticultores.

Insiste Hernández en que, “Bodegas Fontana es cien por cien ecológico y vegana. Esta campaña les ha sucedido a los viticultores que cuando la humedad ha subido a un 60-70 % y la temperatura se ha encontrado a 20-22 grados centígrados, el mildiu prolifera y han tenido que hacer más tratamientos para hacer que el hongo no se desarrollase. Hay que reconocerles la labor a los viticultores, que tienen que pasar una auditoria externa para certificar su producción ecológica y poder ofrecernos su uva certificada en ecológico de máxima calidad”.

Espaldera o vaso

En el cultivo en espaldera, nos explica la enóloga de Fontana, "la viña está elevada un metro o metro u medio, lo que facilita la aireación del racimo, con lo que es más probable que en el cultivo en vaso se quede esa humedad que puede dar lugar a la aparición de hongos. Con un racimo más aireado, con menos hojas arropándolo, hace que se evite ese riesgo de hongo". Respecto a la mecanización, "nosotros empezamos a vendimiar a maquina hace mucho tiempo, pero esa mecanización, que se hace muy lentamente, no hay daño en la uva y el beneficio es que llegamos a vendimiar las 400 hectáreas propias que tenemos en el momento óptimo de recogida. La mano de obra manual, sin embargo, es más lenta. Con el cultivo en vaso, sobre todo la variedad de airén blanco, que requiere mano de obra manual para recogerla, ese factor de las cuadrillas de recogida es cada vez es más difícil de conseguir, con lo cual los viticultores se están apuntando a reconvertir sus viñedos a espaldera".

Respecto a la superficie propia de Fontana “la mayoría está en altura, en nuestro caso, pero vamos a mantener en vaso los viñedos de más edad, porque la viña de manera natural se va regulando a lo largo de los años, hay una cierta evolución. Se regula la cantidad de producción de uva por la misma viña y esa merma de cantidad redunda en un aumento de calidad, indiscutible, que aporta al resto de la producción, por eso las vamos a mantener siempre”.