La Audiencia de Barcelona mantiene en prisión a Dani Alves
Los magistrados consideran que existe un riesgo de fuga suficiente para que el futbolista siga entre rejas
La Audiencia de Barcelona mantiene a Alves en prisión provisional por el elevado riesgo de fuga
ATLAS
La Audiencia Provincial de Barcelona ha decidido mantener a Dani Alves en prisión preventiva, acusado de violar a una joven en una discoteca de Barcelona. Los magistrados han dado la razón a la fiscalía y a la víctima y consideran que el riesgo de fuga es suficientemente elevado como para mantener al futbolista entre rejas a la espera de juicio.
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“Examinados todos los argumentos, compartimos con las acusaciones que concurre un elevado riesgo de fuga vinculado, por una parte, a la elevada pena que puede serle impuesta en la presente causa, los severos indicios de criminalidad contra el mismo y la capacidad económica abultada que le permitirían como hemos dicho abandonar España en cualquier momento”, concluye la sección tercera de la Audiencia.
El tribunal resuelve así la petición de libertad que hizo la defensa del futbolista en un recurso, en el que ponían en duda la versión de la víctima, y se abrían a que el futbolista llevara una pulsera telemática para asegurar su presencia en España. “Descartamos que las medidas alternativas a la prisión provisional que propone la defensa sean suficientes para neutralizar el riesgo de fuga que hemos calificado como elevado”, argumentan las magistradas.
El abogado de la defensa Cristobal Martell (i), la abogada de la acusación Ester García López (2d), durante la vista celebrada esta mañana en la Audiencia de Barcelona. / Quique Garcia
Los jueces tachan las "posiciones maximalistas": "Ni Alves es objeto de persecución mediática, ni su libertad atacaría a la dignidad de la víctima"
El auto repasa detalladamente cada uno de los argumentos que esgrimieron acusación y defensa. “Pese a la presión mediática en este caso, la resolución del recurso debe ser serena y minuciosa”, escribe la magistrada ponente, Carmen Guil, para rebajar las “posiciones maximalistas” de ambas partes: “Ni el Sr. Alves es objeto de una persecución mediática y judicial que fundamenta la prisión provisional, ni el alzamiento de dicha medida cautelar atacaría la dignidad de la afirmada víctima”, resume.
La acusación pidió mantener en prisión al exjugador del Barça, esgrimiendo los múltiples indicios que, en su opinión, le incriminan, entre ellos, las pruebas de ADN. La abogada de la joven aseguró que una hipotética libertad provisional para el jugador "sería un atentado a la integridad psicológica" de la víctima. "Que él esté en libertad mientras ella está encerrada, la administración de justicia no se lo puede permitir", afirmó Ester García López.
El tribunal rechaza ese argumento, para dejar claro, que la prisión provisional, de carácter excepcional, y en ningún caso “ni la libertad provisional ni una hipotética sentencia absolutoria serían ataques a la dignidad de ninguna víctima”. “Su seguridad y estabilidad emocional deben ser abordadas en espacios de atención a la víctima, independientemente del curso del proceso. La prisión provisional tiene una naturaleza excepcional y debe venir sólidamente fundada en indicios”, responden las magistradas.
Sin arraigo suficiente en España: "Alves viene a Barcelona solo de vacaciones"
La defensa del futbolista, sin embargo, intentó demostrar que el riesgo de fuga no es tal. Los abogados Cristóbal Martell y Arnau Xumetra argumentaban que Alves colaboró con los investigadores y viajo desde México para declarar antes los Mossos. Insistieron también en que el futbolista tiene arraigo en España, ya que está empadronado en Esplugas de Llobregat y su mujer es de nacionalidad española. La defensa intentó desmentir la capacidad económica del futbolista, alegando que había perdido “músculo económico” porque el Pumas de México le ha echado y el grueso de sus patrocinadores le han abandonado.
El tribunal descarta esas explicaciones: “No es admisible minimizar su vasto capital, propio de un jugador de futbol de élite, como es de todos conocido”. Los jueces tampoco consideran que haya arraigo: “Ni su empadronamiento en Esplugues ni su matrimonio con una española permiten despejar las dudas sobre su arraigo. La vinculación es meramente administrativa y el propio Sr. Alves reconoció que viene a Barcelona solo de vacaciones”, concluyen.
Encarcelado hasta el juicio
La decisión del tribunal supone un jarro de agua fría para la defensa, ya que aleja, incluso a largo plazo, la posibilidad del brasileño de quedar en libertad. “Es previsible -y deseable- que en un corto periodo de tiempo la instrucción esté completada y concluido el sumario, por lo que la prisión provisional puede mantenerse durante un lapso temporal razonable, sin alcanzar los máximos legamente previstos”, dicen los magistrados.