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"Desde muy pequeña, mi padre siempre me decía que yo lo buscaba, que yo quería esto, sentía que era culpa mía"

Irene sufrió abusos por parte de su padre durante su infancia y reclama cambios en el sistema judicial

Irene, víctima d'abusos sexuals: "Des de molt petita, em deia que jo el buscava, que jo volia això. Jo sentia que era culpa meva"

Irene, víctima d'abusos sexuals: "Des de molt petita, em deia que jo el buscava, que jo volia això. Jo sentia que era culpa meva"

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En una conversación en el 'Aquí Catalunya', Irene ha compartido su testimonio desgarrador sobre los abusos que sufrió durante la infancia por parte de su padre. La joven, ahora ya mayor de edad, ha detallado con coraje los años de tormenta que enfrentó en manos de alguien en quien confiaba. Los abusos, que empezaron desde pequeña, dejaron cicatrices emocionales profundas en la vida de Irene: "Por culpa de este episodio tuve que ingresar en un centro psiquiátrico. Siempre quedan secuelas".

La vida de una persona que ha sufrido abusos es muy diferente a como la sociedad la percibe. Irene explica que la educación que se hace sobre los abusos está muy centrada en los abusos sufridos por parte de desconocidos como: “Ir por la calle y que abuse de ti un hombre desconocido", pero no tanto que pueda abusar de ti una persona de tu circulo de confianza, como un familiar, por lo tanto, identificarlo es mucho más difícil.

En esta línea, Irene comenta que cuando era pequeña ella no sabía que los abusos podían darse dentro de la familia. Lo veía como una cosa cotidiana en su casa, no podía discernir si lo que estaba pasando estaba bien o estaba mal, porque no tenía conciencia que su propio padre pudiera abusar de ella: "Como nunca me habían hablado que esto podía pasar, que tu padre pudiera abusar de ti, pues yo, hasta los 10 años, no sabía qué me estaba pasando. Yo no lo veía ni mal ni bien".

A medida que iba creciendo, Irene se fue dando cuenta que esto que estaba pasando no era normal, que no estaba bien: "Esto era una cosa de personas adultas y lo que estaba pasándome con mi padre, estaba mal". Además, ella misma explica que cuando en el colegio empezó a estudiar la reproducción sexual en las clases de biología y los niños hablaban de cómo se desarrollaban sus cuerpos, entendió que aquellas cosas que le pasaban con su padre no eran normales, no era el que tendría que estar viviendo una niña de 10 años.

Ha confesado que otro aspecto que le hizo repensarse la situación que estaba viviendo, fue cuando su padre le ponía pornografía y ella veía que no eran niños: "Tampoco era una niña pequeña y su padre. Eran dos persones adultas. Estaba empezando a ver que esto no estaba bien", puntualizó.

Cuando ella se dio cuenta de todo lo que le pasaba, calló. No se lo explicó a nadie, ni a una amiga, ni a su madre, a ninguna persona. Ella se sentía culpable, porque su padre le hizo sentir que ella tenía la culpa de que esto estuviera pasando: "Desde muy pequeña, mi padre siempre me decía que yo lo buscaba, que yo quería esto. Yo sentía que era mi culpa, que estaba haciendo algo mal".

No lo quiso explicar a nadie, porque pensaba que los otros también la verían como culpable y la tildarían como la "mala de la historia". El padre todavía justificaba esto que le estaba haciendo explicándole que era normal, que a todas sus amigas sus padres le hacían lo mismo, pero ella sabía que esto no era verdad, que sus amigas no estaban en aquella situación, pero, aun así, no lo explicaba por miedo a que la gente creyese que era la culpable y no la víctima.

"Yo tenía 12 años y cada vez la situación era más intensa, él cada vez quería más. Entonces, llegó un momento que ya no podía aguantarlo y acabé explicando a tres amigas mías todo lo que me estaba pasando", así fue como Irene acabó confesando que su padre abusaba de ella, cuando ya no podía más, cuando se encontró en el límite.

No fue hasta un año más tarde de esta confesión, que Irene se lo comentó a una profesora, porque ella señala que no podía explicarle a su madre que su padre abusaba de ella, puesto que la madre también sufrió abusos sexuales por parte del padre de Irene: "No me veía con corazón de decirle a mi madre que yo también estaba pasando por esta situación con mi padre". Entonces, fue la docente quien rápidamente trasladó toda la información a la madre y se activó el protocolo de abuso infantil en la escuela.

La denuncia se presentó poco después y durante la confesión que hizo Irene ante los Mossos d'Esquadra, la acompañaba su profesora y no su madre: "No me veía preparada para explicar todo delante de mi madre. No podía, me daba vergüenza, porque yo todavía sentía que era mi culpa".

"Fui a hacerme una revisión, pero en el centro médico nunca me la hicieron. Era muy importante para un juicio una revisión, pero, finalmente, yo no tenía ninguna prueba médica", relata Irene. Dos días después se celebró un juicio a puerta cerrada en la Ciudad de la Justicia de Barcelona, pero no se consiguió condenar al padre por abusos sexuales. Después de la celebración de dos juicios, el primero cuando lo denunció con 14 años y el juicio final en 2023, Irene apunta que el problema no es que su padre no esté en la prisión por abusos, sino que ella no tiene ningún tipo de protección: "Él se puede acercar a mí todo el que quiera, porque no hay ninguna orden de alejamiento". Hasta hace un año, Irene no podía salir de casa, porque tenía miedo: "Sabe donde vivo, me daba mucho miedo."

Ahora explica que ya no siente angustia. Actualmente, hace charlas de reflexión sobre la situación de las personas que han sufrido abusos y ella considera que las víctimas no están protegidas: "Pensaba que se nos cuidaba más y me estoy dando cuenta que no". La joven ha aclarado: “Antes pensaba que se le estaba dando mucha más importancia a todo esto, pero después de haber pasado por todo el proceso judicial, me doy cuenta que no estamos protegidas de nada y me sabe muy mal. Y es que muchas veces pasas un abuso y la ayuda psicológica es mínima”.

Ha remarcado la importancia que las personas sepan que estas cosas suceden, que no se tienen que silenciar: "Yo cuando no se lo decía a nadie, pensaba que estaba loca por cómo me sentía y por lo que pensaba del hecho que mi padre abusara de mí, que estaba mal pensar esto de un abuso", ha comentado Irene.

En estas situaciones el hecho de compartir este testimonio puede ayudar a concienciar a la sociedad sobre estas problemáticas que existen, y que por desgracia cada vez se acentúan más. Además, estos testimonios también pueden servir de alentador para que otras personas que estén pasando por una situación similar no se sientan suelas y puedan hacer frente al infierno que están viviendo.

Paula Pascual

Paula Pascual

Periodista. Aprenent cada dia a Aquí Catalunya a Ser Catalunya.

 
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