El CIS aleja a Ayuso de la mayoría absoluta y rompe el empate en la izquierda

El Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) dibuja un panorama mucho más favorable para la izquierda el próximo 28 de mayo. El Partido Popular repetiría como fuerza más votada, pero no alcanzaría en ningún caso una representación suficiente como para eludir a Vox. El instituto demoscópico le da a Ayuso entre 55 y 67 diputados, frente a los 65 que tiene actualmente en la Asamblea de Madrid.

Los populares necesitarían a Vox en cualquier caso para mantener el Gobierno regional, a pesar de que las relaciones entre ambas formaciones no pasan por el mejor momento tras el fracaso de las negociaciones presupuestarias para 2023. La ultraderecha seguiría teniendo la llave de la Puerta del Sol, en caso de que Ayuso quiera repetir, aunque los de Rocío Monasterio perderían posiciones. Según el CIS, Vox se quedaría entre 7 y 9 diputados, en lugar de los 13 que consiguió el pasado 4M.

“Hoy la lotería reparte ilusiones entre los españoles; y Tezanos -José Félix Tezanos, presidente del CIS-, entre los socialistas”, ha respondido irónica Ayuso minutos después de la publicación del barómetro. En el PP son escépticos con los resultados del CIS porque creen que siempre sobreestima la intención de voto de los socialistas. “Antes del 4M daban la mayoría a la izquierda y al final sumamos más que toda la izquierda junta”, resume una fuente de confianza de la presidenta.

La otra gran novedad del sondeo afecta al otro lado del arco parlamentario. El CIS rompe el empate técnico entre Más Madrid y PSOE a favor de los socialistas. Actualmente las dos formaciones tienen el mismo número de representantes en la Cámara, 24; y en las elecciones apenas les distanciaron 6.500 votos. Ahora, según este estudio, el socialista Juan Lobato aventajaría a Mónica García. El PSOE obtendría entre 31 y 38 diputados, frente a los 21-25 que conseguiría Más Madrid.

“Se consolida la tendencia que dice que el efecto Ayuso era eso, un efecto, y ha pinchado”, resume García, que ve a su partido “en condiciones de liderar una alternativa progresista”. Y es que en Más Madrid también dudan del resultado que el CIS da al PSOE: “Nuestras encuestas y las de otros partidos nos dan muy por encima –de los socialistas-”, explica una fuente del partido verde. En el PSOE, Juan Lobato, se confiesa “contento” con la encuesta, que le coloca –asegura- como “relevo claro a Isabel Díaz Ayuso”. Fuentes del PSOE ven en los datos un aval a su estrategia de “hacer propuestas solventes frente a la política de los numeritos”, aseguran.

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El sondeo del CIS deja muy abierto el escenario de gobernabilidad a partir del 28 de mayo de 2023 en la Comunidad de Madrid. Las horquillas de escaños tan amplias que ofrece este estudio permiten dibujar una Asamblea similar a la actual, con un PP con amplía mayoría -superior incluso a la actual-, que suma más que toda la izquierda junta; o, por el contrario, una Cámara regional con una mayoría clara de izquierdas, que arrebataría la Presidencia de la Comunidad de Madrid a Isabel Díaz Ayuso, gracias a un tripartito PSOE-Más Madrid-Unidas Podemos.

Alejandra Jacinto, en el peor de los casos, se estrenaría al frente de los morados calcando prácticamente los resultados que consiguió Pablo Iglesias. El CIS le da entre 10 y 13 diputados, frente a la decena que consiguió el fundador de Podemos. “Las fuerzas progresistas no pueden conformarse con seguir siendo oposición al Gobierno de Ayuso”, reclama la candidata de Unidas Podemos. Tezanos no descarta incluso la reentrada de Ciudadanos en la Asamblea de Madrid y atribuye al partido naranja una horquilla de 0-4 diputados.

El sondeo del CIS no recoge las reacciones a la decisión de Vox de tumbar el proyecto de Presupuestos de 2023, aunque sí los primeros compases de la huelga en Atención Primaria. El trabajo de campo comenzó solo cuatro días después de la multitudinaria manifestación en Madrid contra la política sanitaria de Ayuso y terminó el 2 de diciembre.

Ayuso, una figura polarizante

Los resultados del sondeo dejan de manifiesto que Isabel Díaz Ayuso, que era una absoluta desconocida para el gran público en 2019, es ahora una figura que levanta pasiones –para bien y para mal-. La presidenta regional ha construido su perfil político sobre la oposición al Gobierno central, más que en el alarde de la gestión propia, y a menudo desde la crítica más furibunda. Esa estrategia tiene su reflejo en una visión muy polarizada de la realidad autonómica.

Madrid es la comunidad autónoma, entra las doce regiones estudiadas -más Ceuta y Melilla-, donde la población está más dividida a la hora de valorar la gestión de su presidente o presidenta. El 18% de los madrileños cree que la gestión de Ayuso durante el último año ha sido “muy buena”, casi ocho puntos más que en la siguiente –Canarias-; pero es también donde un mayor porcentaje de la población cree que esa misma gestión ha sido “muy mala”. El 31,2% de los ciudadanos de Madrid así lo cree, frente al 15,6% de los cántabros -los siguientes en la lista- que opinan lo mismo de Miguel Ángel Revilla.

Esa misma tendencia se aprecia en la pregunta sobre la situación general de la comunidad autónoma: un 12,8% de los madrileños cree que es “muy buena” -ninguna otra región tiene tantos satisfechos con la gestión de su gobierno-; pero un 10,9% opina por el contrario que es “muy mala”. A la hora de puntuar esa gestión de 1 a 10, un 21,6% de los encuestados da al Ejecutivo de Ayuso la nota mínima, siete puntos más que la siguiente –Extremadura-.

Madrid es la región con más insatisfechos con sus servicios públicos

Las comunidades autónomas gestionan algunos de los servicios básicos más importantes para los ciudadanos, como la sanidad, la educación o la dependencia. En la Comunidad de Madrid la oposición acusa al Gobierno regional de buscar el rédito electoral de la bajada de impuestos a costa de infrafinanciar esas prestaciones públicas y ese mensaje estaría empezando a calar en una parte de la población, que valora muy negativamente su situación actual.

En pleno conflicto laboral con los médicos, casi un tercio de los madrileños -el 29,5%- asegura estar “totalmente insatisfecho” con los servicios sanitarios. De nuevo, Madrid es la comunidad donde más gente está absolutamente disconforme. En el caso de la educación, ese porcentaje alcanza el 14,3% de los encuestados, también más que en cualquier otra región. Lo mismo ocurre con los servicios sociales, con un 13,3% de madrileños con la opinión más negativa posible. Si hablamos de vivienda, un 41,2% de los madrileños está “totalmente insatisfecho” con la facilidad para encontrar casa. El descontento solo es mayor en Baleares.