Así está funcionando el proyecto estrella de Ayuso para la Atención Primaria en Madrid: las dudas se mantienen y "barniza el problema, no lo soluciona"

Madrid

Es una de las medidas que el Gobierno de la Comunidad de Madrid esgrime para frenar la huelga de médicos y pediatras de Atención Primaria. Una programa que iba a a suponer "un antes y un después en la calidad asistencial", según el consejero Enrique Ruiz Escudero. Pero, seis semanas después de su teórica puesta en marcha, el proyecto piloto sobre exceso de agenda médica en 22 centros de salud de la Comunidad de Madrid sigue presentando muchas dudas sobre su funcionamiento.

"Lo que nos transmiten desde las diferentes Direcciones Asistenciales es una implantación bastante diferenciada dependiendo de los distintos tipos de centro" confirma Ángela Hernández, secretaria general del sindicato médico AMYTS. La idea de la Consejería es que, con este plan, los médicos de familia podrían dedicar 10 minutos a cada paciente hasta un máximo de 34 al día, 24 para los pediatras, pero los cálculos han chocado con la realidad de la falta de profesionales.

"En aquellos centros que tenían una demanda más ajustada la implantación se produce de una forma mas sencilla mientras que los que tienen mucho déficit de profesionales o una demanda de población elevada es mas complicada" remarca Hernández. Porque uno de los fenómenos que se está dando es la creación de nuevas agendas para lograr que se cumplan esos ratios. "Desde las Direcciones Asistenciales se les obliga a crear unas agendas de sobrecarga como las actuales en las que se ven todos los pacientes sobrantes quieran o no quieran los profesionales".

Una situación que confirman los profesionales. Por ejemplo, en uno de estos 22 centros, según sus trabajadores, el proyecto comenzó la semana pasada y estarían en marcha hasta seis agendas distintas. La que limita a 34 y 24 el número de pacientes, la de rebosamiento, otra para los voluntarios que quieran doblar turno además de las agendas de urgencias, la de los avisos de profesionales que están en huelga y otra más para los avisos que no tengan hueco.

Las dudas se reproducen en otros centros donde, según los profesionales, no se ha implando aún el proyecto y siguen las reuniones. Pero ya hay sanitarios que advierten de esas "trampas". Una de estas profesionales señala que también en su centro habrá una agenda "no nominal" y que además no se pueden forzar citas. Es decir, si llega un paciente complejo se le atendería sin que conste en ningún lado.

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Han pasado seis semanas pero sigue habiendo flecos por pulir que impiden una imagen completa de la situación y hay directores de Centros de Salud que prefieren esperar para analizar por completo este proyecto pero desde AMYTS Ángela Hernández cree que de confirmarse estas situaciones sería "barnizar el problema, no solucionarlo".

Desde la Consejería de Sanidad son más optimistas y aseguran que la implantación del nuevo modelo de agendas se está haciendo "en varias fases". Fuentes de este departamento insisten en que se está trabajando ya en los 22 centros del piloto, que en junio se incorporarán 115 centros más y el resto lo harán a partir de septiembre.