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"Van a comer por 4,40 euros al día. Es una vergüenza": el Gobierno de Ayuso reduce en medio millón de euros el dinero para la comida de esta residencia

La diputada del PSOE, Lorena Morales, denuncia que tampoco aumenta la plantilla de esta residencia pública gestionada por la empresa Aralia

La residencia de ancianos Peñuelas / Aralia

Madrid

En el año 2020 cuando la Comunidad de Madrid sacó el pliego para adjudicar la gestión de la residencia de Peñuelas (distrito de Arganzuela, Madrid) se dedicaba 1.816.537 euros al capítulo de bienes y servicios, donde se incluyen partidas tan importantes como el dinero que se dedica a la alimentación, a la limpieza o a la lavandería. Ahora ha salido un nuevo contrato y la partida para alimentación y limpieza se queda en poco más de 1.000.000 de euros (1.361.460), es decir, que pese a las denuncias de las familias, pese a la inflación, tres años después se baja el dinero que se debe invertir en casi medio millón de euros (455.077).

Lorena Morales, la portavoz del PSOE en temas de Políticas Sociales, ha echado cuentas de la partida concreta de alimentación del nuevo contrato. "La alimentación de esos mayores va a salir por unos 4 euros con 40 céntimos al día. Es una vergüenza. La Comunidad de Madrid no ha aprendido nada y sigue dejando abandonados a los cientos de mayores que tiene a su cargo".

En el capítulo de personal tampoco se aumenta la plantilla y en el caso de las gerocultoras, que son el personal de atención directa a los mayores, van a pasar de 52 a 50. "Tanto tiempo que llevábamos reclamando la mejora de Peñuelas para acabar sacando un pliego que no solo no va a mejorar, al contrario, va a deteriorar la situación de las 220 personas mayores que residen allí", añade la diputada.

El montante total del nuevo contrato que se saca ahora a licitación sí supone un aumento respecto al de 2020 pero porque se ha tenido que dedicar más dinero a los salarios de la plantilla porque hay un convenio colectivo que lo obliga así. "Es un pliego trampa porque el aumento de la inversión se debe a la obligación que tienen de adecuarse a los nuevos salarios que recoge el convenio colectivo", explica Morales. Desde el grupo socialista de la Asamblea de Madrid insisten en que las 18 residencias públicas que están gestionadas por empresas en la región tienen que volver a ser cien por cien públicas.

El Gobierno de Ayuso evita contestar

A preguntas de Radio Madrid, tras la rueda de prensa del Consejo de Gobierno de Isabel Díaz Ayuso, el portavoz regional, Miguel Ángel García, ha eludido explicar los motivos de este nuevo contrato a la baja en la alimentación de la residencia. Se ha limitado a decir generalidades. "Venimos trayendo a este Consejo y después explicando en esta rueda de prensa, importantes incrementos en los contratos que se están realizando con nuestras residencias con ese objetivo de adecuarlos a un contexto de subida generalizada de los precios y, lo más importante, el compromiso de la Comunidad de Madrid para mejorar la calidad en la atención de aquellas personas que han decidido vivir en las residencias de la región para que puedan ser atendidos de manera especializada y puedan tener las mejores y las más dignas condiciones", ha dicho.

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Una residencia con una historia de denuncias

La historia de la residencia de mayores pública de Peñuelas está plagada de denuncias de las familias y los residentes por la mala gestión. Es un centro público de los llamados de gestión indirecta que significa que su gestión la tiene una empresa, en este caso Aralia. En 2015 se denunció que ese centro llevaba cuatro años funcionando sin licencia bajo esa empresa, que pertenece a José Luis Ulibarri, uno de los condenados en el caso Gürtel. Las familias denunciaban entonces una plaga de cucarachas.

Un residente, Tomás Plaza, denunciaba el año pasado la calidad de la comida y la falta de personal que no llegaba a poder atender a todos los mayores. En marzo de este año otra residente, María González, se quejaba de los menús del centro y, tres meses después, vivió una pesadilla al esperar más de una hora para que alguien la atendiera de madrugada porque tenía problemas para respirar.

Elena Jiménez

Soy periodista desde hace algo más de un par...