¿El pago con el teléfono móvil es seguro?
El uso del teléfono móvil para realizar pagos es una práctica cada vez más habitual, pero hay que tener en cuenta algunos consejos para protegerse de robos o usos fraudulentos
Cada vez más compras se pagan mediante la tecnología NFC. / Zorica Nastasic
Fuenlabrada
La tecnología NFC en los teléfonos ha convertido este sistema de pago cada vez más habitual en nuestras compras en comercios. El pago es tan sencillo como acercar el móvil al datáfono para abonar lo comprado y nos olvidamos. Pero la pregunta es si este sistema es suficiente seguro ante los ciberdelincuentes y no puede convertirse, si no tomamos ciertas medidas, en la puerta de entrada a las cuentas bancarias del usuario en cuestión.
La Organización de Consumidores OCU ha realizado una serie de recomendaciones al respecto para que el pago mediante nuestro móvil sea algo seguro. Si es cierto que sobre esta tecnología se han difundido rumores y falsas noticias exagerando los riesgos, lo cierto es que es una forma de pago segura si se tiene en cuenta ciertas recomendaciones que recuerda José Antonio Rubio, doctor Ingeniero en Ciberseguridad por la URJC.
Así, indica, un sistema seguro de pago debe cumplir con la Directiva Europea de Servicios de Pago y esto supone que debe obligar al usuario a verificar su identidad con, al menos, dos elementos de autenticación. Hay que tener en cuenta, dice, que para realizar el pago es necesario primero desbloquear la pantalla del dispositivo, lo que supone conocer el PIN, usar un reconocimiento biométrico o saber el patrón de desbloqueo y eso ya ofrece un nivel de seguridad.
Consejos prácticos
Entre otros consejos la OCU recuerda que es aconsejable:
- Tener un bloqueo de pantalla con un PIN robusto, es decir no menos de ocho elementos, con letras, mayúsculas y minúsculas, números y símbolos. O usar un patrón complicado o el uso, por ejemplo, de la huella dactilar.
- Tener bloqueada la tarjeta SIM con un PIN y evitar que el número sea el mismo que la contraseña usada para desbloquear la pantalla.
- Evitar conectarse mediante redes públicas o no seguras, en las que no se pide contraseña de acceso.
- Desactivar el sistema y quitar las tarjetas si se le da a una tercera persona, por ejemplo, para su reparación o instalación de algún elemento.
- Mantener actualizado el sistema operativo de forma habitual
- Instalar un antivirus para evitar hackeos del teléfono que pueden permitir al delincuente tener acceso a nuestros datos y a la app bancaria que tengamos descargada.
Según indica la OCU, la responsabilidad del titular en casos de fraude antes de notificar el robo o la pérdida del teléfono está limitada a un máximo de 50 euros. En estos casos es necesario actuar de forma rápida y contactar con el banco para dar cuenta de lo ocurrido y anular o bloquear la tarjeta de cré
