El Banco de Alimentos de València prevé un aumento masivo de la demanda social en otoño debido a la situación inflacionista

València

El Banco de Alimentos de València asiste en estos momentos a 64.000 personas con problemas para costearse la cesta de la compra. Algunas de ellas llegan a su red a través de los 257 centros benéficos que hay repartidos a lo largo y ancho de toda la provincia de Valencia, mientras que alrededor de unas 12.000 familias son atendidas en los repartos de alimentos realizados en Mestalla (4.500) y en La Pobla de Vallbona (8.000). Sin embargo, estas cifras podrían aumentarse en los próximos meses -y hacerlo, además, de forma considerable y alarmente- debido a la situación inflacionista.

Y es que la crisis de precios ha provocado que se hayan disparado las peticiones de ayuda entre los valencianos y las valencianas, que cada vez alargan más las colas de hambre de estos actos solidarios. De hecho, hasta 67 nuevas familias fueron dadas de alta durante el último reparto que la entidad realizó a las puertas del estadio de Mestalla. Un dato que su presidente, Jaime Serra, califica como "descomunal". "Lo que pasó en el último reparto no lo habíamos vivido nunca", explica.

La guerra provocada por la invasión rusa en Ucrania fue el punto de partida que propició que muchos gastos cuotidianos como la cesta de la compra se dispararan y alcanzaran cifras desorbitadas, al igual que ocurre con la factura de la luz o con el precio de las bombonas de butano. Un suma y sigue que hace que los bolsillos de las familias se resientan y sea muy difícil llegar a fin de mes e, incluso, costear una necesidad tan básica como los productos de alimentación.

Y lo cierto es que las previsiones de cara al otoño no son nada optimistas. Según asegura Serra, durante los meses de octubre, noviembre y diciembre se espera un "aumento masivo de la demanda social", por lo que se muestra realmente preocupado y pide a las autoridades que no los abandonen.

En este sentido, Serra agradece la colaboración de las diferentes empresas y familias valencianas que, a través del mundo del voluntariado, ayudan a la asociación a adquirir alimentos para ayudar a las personas en situación de vulnerabilidad: "Tenemos una salud de hierro, con almacenes llenos de género".

En consecuencia, la cobertura de las solicitudes de amparo social está garantizada, y eso alivia al dirigente. "Damos gracias por no sufrir ningún problema de abastecimiento", responde preguntado sobre si la escalada de precios también se ha notado en el banco, ya que con la misma recolecta se pueden comprar menos productos.