La ley trans estatal: una norma "a la valenciana" que no ha generado problemas en cinco años de aplicación

València

Más de 1.000 personas trans solicitaron el cambio de nombre en el sistema público de salud entre 2017 y 2021, beneficiándose así de la Ley trans valenciana que se aprobó hace cinco años. El balance es, tanto para los colectivos LGTB como para la Conselleria de Políticas Inclusivas, muy positivo, ya que además no se ha registrado ningún caso de arrepentimiento, y tampoco ha habido ningún problema a la hora de cambiar el nombre.

Ahora, las personas trans piden que la Ley estatal que tramita el Congreso se acabe aprobando para despatologizar definitivamente la transexualidad y que deje de ser considerada una enfermedad. Insisten en que la autodeterminación de género es fundamental para garantizar los plenos derechos de estas personas.

¿En qué consiste la ley trans valenciana?

La norma se aprobó en 2017 y permite el cambio de nombre a las personas trans en cualquier momento de su vida, y en todos los servicios de competencia autonómica. Esto significa que las personas que quieran cambiar de género no necesitan dos años de hormonación ni informes médicos para, por ejemplo, cambiar su tarjeta sanitaria, modificar su nombre en colegios, institutos o universidades, o para ser atendidos en la administración autonómica.

Hasta 2021 la conselleria de Sanitat había realizado 1.005 cambios de tarjeta SIP y el servicio Orienta de atención a personas LGTB había realizado 5.300 atenciones a personas trans. En el sistema educativo, se ha activado 221 veces el protocolo para atender a personas trans.

Desde el colectivo LGTB Lambda, Nahbi Iturbide, hace un balance positivo del funcionamiento de esta ley ya que permite a las personas trans que se les identifique con el pronombre que ellos o ellas sienten desde el primer momento, y no haya que esperar dos años para hacerlo. Por eso, pide que en el resto de España se apruebe una Ley parecida a la valenciana para permitir, además, acabar con las "injusticias" que se producen en algunas comunidades autónomas donde ahora mismo no hay aprobada ninguna ley trans.

¿Qué cambios supondrá la ley estatal?

La nueva ley que se tramita en el Congreso de los Diputados va en sintonía con la valenciana, y permite el cambio de nombre en el resto de administraciones públicas. Ahora mismo, las personas trans que quieren cambiar su DNI necesitan un informe médico y dos años de hormonación, pero con la nueva Ley ya no será necesario. Esto provoca que una parte del feminismo y algunos partidos como el PSOE teman que se vaya a generar inseguridad jurídica, o incluso que se produzca un borrado de las mujeres por parte de hombres que cambien de género sin ser trans.

Un debate que, según el director general de Diversidad, José De Lamo, está zanjado, ya que en estos cinco años de Ley trans valenciana no se ha detectado ningún problema y ninguna persona trans se ha arrepentido.

También Iturbide cree que la autodeterminación no tiene nada que ver con algunos temas sobre los que se está hablando y simplemente contempla que la decisión sobre el género de cada uno resida en él mismo o en ella misma y no en un informe médico que tiene que decidir, en última instancia, sobre la identidad de género de cada persona.

Desde parte del colectivo feminista insisten en que es un asunto muy complicado, con muchas aristas, aunque prefieren no expresar su opinión en este caso.

Lambda pide seguir avanzando en derechos

Pese a que en la Comunitat Valenciana se haya avanzado mucho estos años, desde Lambda recuerdan que las personas trans siguen estando muchas veces excluidas de la sociedad y sufren discriminación a la hora de acceder a puestos de trabajo. Por eso, Nabhi Iturbide cree que es fundamental seguir avanzando en mejorar las condiciones laborales de estas personas que, en muchos casos, viven situaciones precarias.

En la Conselleria de Políticas Inclusivas trabajan, además, para abordar la situación de las personas trans más mayores, que viven una situación en muchos casos peor y que tienen problemas para acceder a la vivienda, por lo que sufren una "extrema vulnerabilidad". De Lamo también anuncia que en los próximos meses la Generalitat va a reforzar el servicio Orienta de atención a personas LGTB y va a descentralizar su atención para que quienes lo necesiten puedan pedir ayuda vivan donde vivan.