La calle de Gabriel y Galán, el poeta de los campesinos

València

Tal día como hoy, un 28 de junio, pero de 1870 nacía en la comarca salmantina de Guijuelo el escritor y maestro José María Gabriel y Galán, un poeta que murió joven, con apenas 34 años, pero cuya obra dejó una profunda huella en los sectores más ultramontanos del país en un momento -a caballo entre los siglos XIX y XX- de gran polarización política. Es cierto que la obra poética de Gabriel y Galán es conservadora en estructura y en temática, y en ella defiende la tradición, la familia y el dogma católico, unas virtudes que, tras su muerte en 1905, fueron ensalzadas por partidos políticos carlistas y tradicionalistas como la Falange y las JONS, que consideraban que la obra de Gabriel y Galán transmitía los valores del buen español: de familia tradicional, honrado, trabajador y educado en la fe cristiana. Pero la realidad es que, a pesar de su profundo sentido religioso, él nunca se adscribió a ninguna corriente ideológica, renegó de la política, a la que consideraba una “mentira inmensa” y vio con pesar como el auténtico sentido de su obra fue intencionadamente manipulado por ambos bandos. No en vano, Gabriel y Galán no quiso más que cantar las virtudes campesinas de las comarcas limítrofes entre Salamanca y Extremadura, incluso utilizando como lengua de escritura el dialecto extremeño, natural de estas tierras.

Así pues, en plena posguerra, la obra de Gabriel y Galán fue instrumentalizada, y su nombre rotulado en decenas de calles y plazas de toda España impulsado desde el propio aparato del Movimiento. En Valencia, la propuesta de rotular una calle con el nombre de Gabriel y Galán partió del médico radiólogo Maximiliano Lloret Gómez, cofundador junto a Onésimo Redondo de las JONS -Juntas de Ofensiva Nacional Sindicalista- y cabeza visible de la Falange en Valencia. Lloret, designado concejal en 1943, fue no en vano uno de los ideólogos más influyentes en la conformación del nomenclátor franquista durante la posguerra. La calle seleccionada para llevar el nombre del poeta salmantino fue una de las que conformaban el barrio de casas baratas de La Previsora, en el distrito de Jesús. Este grupo de viviendas se construyó en 1927, y las calles se distinguían en un principio por una numeración ordinal de oeste a este: primera, segunda, tercera, etc. Pero en 1945, y a propuesta del mencionado Maximiliano Lloret, la calle 1ª fue rotulada como calle de Poniente, por su situación geográfica dentro del barrio; la 2ª, calle de Eduardo González, fundador de la sociedad Valenciana de Electricidad y expresidente de la Junta Rectora del barrio; la 3ª, calle Carteros, nombre oficioso del barrio por ser esta la profesión de muchos de sus vecinos; la 4ª, calle La Previsora, nombre oficial de la cooperativa; y la 5ª, la más cercana a la calle San Vicente, entre las de Marqués de Bellet y Joaquín Navarro, fue la que adquirió el nombre de calle de Gabriel y Galán.