Inquietud en el campo alicantino ante la posibilidad de una oleada de robos por la subida de precios

La Unió de Llauradors ha solicitado a la subdelegación del Gobierno en Alicante la convocatoria del Grupo de Trabajo de Seguridad en el Ámbito Rural que aborde la problemática de los robos en el campo.

Desde la organización agraria recuerdan que estamos en plena campaña de recolección de cultivos tan importantes para la provincia como los cítricos, aceitunas, almendras, granadas o la Uva Embolsada, entre otros.

Alberto Travé, jefe de Zona de La Unió en Alicante, explica que este año, debido a la meteorología y al periodo tan alargado de sequía, las producciones se han visto "muy mermadas". Esto ha provocado que haya una menor cosecha y que aumente el precio de la misma. La producción que ha quedado debe soportar todo el aumento de los costes de producción provocadas por el encarecimiento del gasóleo, los fertilizantes o los fitosanitarios.

Asegura que los agricultores tienen una inquietud muy grande ante la posibilidad de una oleada de robos que pueda haber en dichos cultivos. Esta situación conlleva un grave problema económico para losa agricultores, ya que, a pesar del aumento en el precio de su cosecha, la baja producción y el incremento de los costes derivados de la guerra de Ucrania, hacen que la rentabilidad sea muy ajustada.

En el día de ayer, la subdelegación del Gobierno autorizó a la Unió de Llauradors a que pueda realizar una primera charla informativa, a través del grupo ROCA de la Guardia Civil, para impartir una serie de recomendaciones y precauciones a los agricultores. Entre las recomendaciones, Travé explica que hay que tener mucha precaución con personas y vehículos que no suelen frecuentar esas zonas y sobre todo denunciar cualquier tipo de robo o hurto, por pequeño que sea. Precisamente, inciden en que los robos se suelen cometer a pequeña escala para que no sean considerados como robos, sino como hurtos, evitando consecuencias penales para los delincuentes.

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Además, existe la preocupación por la seguridad alimentaria de los consumidores, ya que se aplican tratamientos fitosanitarios con un período de persistencia durante el cual no se debería poner la fruta a disposición para el consumo, algo que podría ocurrir en caso de robo de cosechas.

La Unió de Llauradors también ha solicitado un incremento del número de efectivos de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado para que se pueda vigilar mucho mejor el territorio y las diferentes zonas de cultivo.