La EMT se enfrenta a un 2014 lleno de incertidumbres

Las dificultades económicas que sufre la EMT han provocado un conflicto entre patronal y trabajadores que, de momento, no tiene visos de solucionarse a corto plazo. La dirección propone rebajas salariales, sin embargo, son unas condiciones que los empleados no aceptan. De momento, el Ayuntamiento de la capital ha llevado a cabo una fusión con Madrid Movilidad para intentar mejorar la situación.

Esa fusión ,con Madrid Movilidad, es el último acontecimiento en un año muy convulso para la EMT. Una decisión del equipo de Ana Botella que no ha sentado demasiado bien en el seno de los trabajadores de la empresa municipal de transportes. Según fuentes sindicales, no es un buen momento para llevar a cabo esta fusión.

Unas pretensiones que se van a negociar a lo largo de 2014. Sobre la mesa, las conversaciones por el nuevo convenio colectivo. El objetivo de la empresa es llevar a cabo rebajas salariales de hasta un siete por ciento. Condiciones que los trabajadores, aseguran, NO aceptan.

Por lo tanto, 2014 se antoja complicado para la EMT. La empresa necesita ingresos y una de las vías para conseguirlos es a través de la venta de algunos activos inmobiliarios, algo que no parece fácil.

De momento, la calidad del servicio se ha visto muy mermada, con recortes que han afectado a más de 30 líneas. Mientras que la absorción de Madrid Movilidad también va a suponer que se eliminen parte de las direcciones generales de ambas empresas y se reorganicen las estructuras intermedias para evitar servicios duplicados.