Teresa Romero continuará aislada hasta que los fluidos de su cuerpo estén limpios de ébola

Se desconoce la fecha en la que Romero va a salir del aislamiento, en cada paciente varía el periodo en el que los fluidos corporales están limpios

Teresa Romero ya no tiene ébola pero todavía podría quedar algún resto del virus en los fluidos de su cuerpo, por eso los médicos del Carlos III han decidido mantenerla aislada. "Estamos extremando la prudencia. Ponemos el listón más alto que en otros países, porque muchos de ellos no tienen las posibilidades tecnológicas para determinar que ningún fluido puede ser fuente de transmisión", explica José Ramón Arribas, jefe de la Unidad de Infecciosos del Hospital La Paz.

Continuará en aislamiento hasta que los exámenes de todos los fluidos de su cuerpo den negativo, es decir hasta que no queden restos de ébola en su material genético. Ese día comenzará su nueva vida. "Cuando determinemos que no hay posibilidad de contagio, podrá abrazar a su familia y no habrá que tomar medidas de precaución", cuenta Arribas. Aunque no tenga ébola, el virus se puede continuar contagiando, por ejemplo, manteniendo relaciones sexuales en las siguientes siete semanas después de haber sido dada de alta.

Se desconoce la fecha en la que Romero va a salir del aislamiento, ya que en cada paciente varía el periodo en el que los fluidos corporales están limpios de ébola. Ese día empezará el periodo de cuarentena para los profesionales que han trabajado con ella: "Comenzará en el momento en el que determinemos que no hay posibilidad de contacto en los fluidos".

El equipo médico está siendo más cauto de lo que aconseja la propia Organización Mundial de la Salud y es que trabajan sobre la marcha, sin experiencias previas. "Que todos tengan la idea de que es la primera vez en el mundo desarrollado que atendemos a estos pacientes", señala el jefe de la Unidad de Infecciosos de La Paz.

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