"El Estado ha llevado su decisión, con un punto de venganza, hasta sus últimas consecuencias"

Bilbao

Jone Goirizelaia ha acudido a la prisión de Logroño, donde este domingo salía en libertad Arkaitz Rodríguez, al igual que lo hacía Miren Zabaleta en Valladolid y Sonia Jacinto en Estremera (Madrid). Asegura la abogada que tiene dos sentimientos encontrados, de tristeza por quienes todavía continúan en prisión no sólo por este caso (en referencia a quienes han cumplido sus condenas y a los presos enfermos a quienes se niega su salida) y de alegría por la salida de estos tres condenados que, recordaba, "han cumplido íntegramente sus condenas", asegurando que "el Estado ha llevado su decisión, con un punto de venganza, hasta sus últimas consecuencias".

Preguntada por el ánimo de Otegi de aquí a seis meses y por su intención de querer volver o no a la política, considera Jone Goirizelaia que "su intención será seguir trabajando políticamente para que Euskal Herria pueda decidir su futuro" y, a partir de ese derecho a decidir, apostar por la independencia. Respecto al recurso presentado ante Estrasburgo, reconoce que el caso Bateragune está sobre la mesa, aunque todavía no hay noticias sobre su admisión a trámite o no. No descarta un varapalo judicial, como el que supuso el caso Parot, "aunque para entonces todos los condenados estén en libertad". La repercusión judicial y política será muy importante, señala.

Sobre los recursos denegados a familiares de víctimas de los GAL para recibir la indemnización del Estado, Goirizelaia ha reconocido que los han elevado al Tribunal Constitucional y que, en función de su respuesta, acudirán también a Estrasburgo.