El Gobierno subvencionará mejoras en edificios para disminuir niveles de radón
Mapa de la presencia de gas radón en España / Consejo de Seguridad Nacional
Madrid
El Plan Estatal de Viviendas 2018-2021, que será publicado en unas semanas, subvencionará las actuaciones en el interior de las viviendas para reducir de forma efectiva el promedio anual de concentración de radón a niveles inferiores a 300 Bq/m3 o que reduzcan la concentración inicial en al menos un 50%.
Así lo ha adelantado Luis Vega, coordinador de Unidad de Edificación Sostenible del Ministerio de Fomento, en la jornada "Radón: un problema de salud pública pendiente de resolver", organizada por la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), coincidiendo con que en febrero acaba el plazo para que el Gobierno transponga una directiva europea al respecto.
El representante de Fomento ha admitido que las administraciones públicas han fallado en la concienciación social de los efectos nocivos del radón, un gas radiactivo que emana del subsuelo y que es el responsable cada año de unas 1.500 muertes por cáncer de pulmón en España.
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Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), es la primera causa de este tipo de tumores en no fumadores y el segundo en fumadores, después del tabaco. De hecho, una persona que fuma en un ambiente con altos niveles de radón multiplica por 40-50 el riesgo.
Testigo directo de los efectos nocivos de este gas es Héctor Jiménez, cuyos padres, según ha relatado, fallecieron con 57 y 65 años de cáncer de pulmón y habían vivido en una casa con altos niveles de radón en Galapagar.
El ciudadano afectado por el radón ha criticado la "innación" de las administraciones públicas, ha pedido campañas de sensibilización social y ha denunciado que haya ayudas para cambiar la caldera y no existan para eliminar el radón en las viviendas.
El director del Grupo Radón de la Universidad de Cantabria, Luis Quindós, uno de los mayores expertos españoles en este asunto, ha destacado la importancia de informar a la población, que no tiene por qué generar alarma, y ha incidido en que hay "muchísimos" trabajadores en riesgo, como los que desempeñan su labor en minas, cuevas turísticas, balnearios, alcantarillas o sótanos.
