La ministra de Sanidad pierde talento
La ministra de Sanidad no considera “dantesca” la exigencia del valenciano en la citada comunidad, un requisito vigente con los gobiernos autónomos del PP

"La línea roja" de Matías Vallés (12/02/18)
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PALMA
La ministra de Sanidad considera “dantesco” que el Govern balear reclame un nivel elemental de catalán, en cómodos plazos, a los trabajadores públicos sanitarios.
La primera pregunta obliga a plantear quién es la ministra de Sanidad.
Porque más de la mitad de españoles, no solo de Balears, son incapaces de identificar a la ministra de Sanidad, tras año y medio en el cargo.
La ministra de Sanidad no considera “dantesca” la exigencia del valenciano en la citada comunidad, un requisito vigente con los gobiernos autónomos del PP.
La ministra tampoco considera “dantesca” la exigencia del gallego en Galicia, gobernada por su correligionario Núñez Feijóo.
La ministra no considera “dantesco” que en Euskadi se fije un nivel lingüístico de vasco, porque el Gobierno de la ministra suspira para que el PNV le apruebe los presupuestos.
Y la ministra tampoco considera “dantesco” que Cataluña requiera un nivel de catalán superior a Balears, un requisito existente desde que Aznar hablaba catalán en la intimidad con Jordi Pujol.
Insultar a Balears siempre le ha salido gratis al Gobierno.
Añade la ministra semidesconocida que con la “dantesca” medida, Balears “pierde talento”.
Pues bien, la puntuación que recibe la ministra de los españoles es de un 2,8 sobre diez.
De talento, no anda especialmente sobrada.




