José Samaniego hace historia

Aranda de Duero

Nunca piensen que nada es imposible sin haberlo intentado antes. Esa es la idea que se extrae de personas y atletas como José Samaniego, un arandino que el pasado martes a las 6.30 (hora española) inició la BadWater, una de las ultramaratones más duras del mundo. Por delante, 217 kilómetros a recorrer en California por el denominado 'Valle de la Muerte', con temperaturas extremas y un desnivel de 4000 metros.

Teniendo en cuenta esos datos, esta prueba parece una locura. Y lo es. Pero solo al alcance de quien, después de mucha preparación, decide embarcarse en nuevos y arduos retos. La superación es la meta que el ultratleta ha cruzado en la madrugada de este jueves, con el pañuelo arandino anudado al cuello, y después de dos días muy complejos y duros que finalizan con el mejor sabor de boca posible. Tras 44 horas y 35 minutos de lucha, ha cruzado la línea de meta. Un hito. Un éxito. Una razón de orgullo para él y quienes le rodean.

El triunfo en este tipo de pruebas es lo de menos. Y en todo caso lo que ha logrado Samaniego tiene un mérito demasiado amplio. Ya no solo se ha convertido en el quinto español de la historia en finalizar la prueba, sino que además ha logrado que propios y extraños le hayan 'acompañado' a lo largo de una aventura extrema. Son decenas las personas que, a través de la geolocalización que llevaba consigo, han ido siguiendo de primera mano los avances de este ribereño, apoyándolo por redes sociales y transmitiendo su fuerza a miles de kilómetros de distancia.

Un apoyo que no solo se ha dado desde fuera. José ha contado en tierras americanas con la mejor ayuda posible: un pequeño staff que le ha ayudado a cumplir un reto personal que quería hacer e hizo realidad y el apoyo lejano de quienes, a pesar de tacharlo de loco, creyeron conforme sucedía la prueba en sus posibilidades. No hay reto pequeño ni imposible para quien sabe superarse.