La papeleta del entrenador
El contragoipe

PALMA
Con la destitución de José Ramón Sandoval, ya son ocho los entrenadores que han dejado su puesto desde que arrancó la segunda división hace tres meses.
Los banquillos arden y ya les auguro, que antes de final de año, algún banquillo más cambiará de dueño en la división plata, que algunos, a inicio de temporada, catalogaban como una primera división b donde hay equipos que han jugado en Europa, como el caso del Mallorca, y más de la mitad han estado al menos una temporada en la máxima categoría del fútbol español.
Los resultados dictan sentencia sin escrúpulos, algunos dirigentes aguantan más y otros, como el caso del Tenerife, les bastó 5 jornadas para destituir a Joseba Exteberría en el Tenerife. No existe la paciencia en la mayoría de banquillos y la exigencia por los tres puntos es una tensión partido tras partido en una liga tan igualada.
Los proyectos deportivos no se hacen a largo plazo, tienen que ser de resultado inmediato y por ello, muchos entrenadores, apuestan por la veteranía y experiencia y no por la juventud y el riesgo. Como siempre, cambiar la dinámica de un equipo que no consigue resultados está en el banquillo y ellos asumen ese rol. La segunda división es una escabechina de entrenadores.




