Violencias

Valencia

Mañana se celebra el día de lucha contra la violencia de género. Un 25 de noviembre más, en el que sigue siendo trágicamente necesario recordar que esta sociedad está tan enferma que es capaz de mantener bajo esta amenaza a la mitad de la población.

Y esa violencia tiene muchas formas: la más evidente, las palizas y las muertes, los acosos y las torturas psicológicas. Pero esa violencia se esconde también bajo formas más sutiles: el lenguaje, la educación, los usos sociales, se encargan de perpetuar un patriarcado que con las alas suficientes puede llegar a ser mortal, pero que suele planear a vuelo raso para mantenernos a todas bajo su yugo, de una u otra forma.

Esta semana, dos ejemplos de los tribunales que ayudan a entender las consecuencias de ese sustrato violento y machista: un tribunal que entiende que no es tentativa de homicidio porque el hombre al final dejó de intentar matar a su mujer, y otro que argumenta que una mujer podría haberse resistido de forma más contundente ante sus violadores.

Detrás de esas justificaciones de la violencia está ese sustrato machista que nos rodea y amenaza. Tomar conciencia e insistir en combatir esas violencias es la única forma de cortar el problema de raíz.