La noche de las costaleras de Santa Cruz

Alicante

El Cautivo, la Virgen de los Dolores, el Gitano y el Descendimiento esperan pacientes en la explanada de la ermita a que el reloj marque las siete de la tarde para comenzar el descenso por las estrechas calles de Santa Cruz.

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A esa hora, no cabrá un alma en el barrio. Miles de personas llenarán las calles y los balcones; llevan un año esperando para revivir uno de los días más bellos de la Semana Santa de Alicante. Costaleros, costaleras y cofrades, con los nervios a flor de piel, rezan a su virgen para que todo salga bien; es su día grande.

LA HISTORIA DEL BARRIO DE SANTA CRUZ

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Pero antes de conocer cómo vive la Semana Santa el casco antiguo de la ciudad, hemos querido conocer la historia de Santa Cruz, un lugar que probablemente a final de la época musulmana, principios de la cristiana, ya estaba habitada de forma estable. Gerardo Muñoz, historiador y miembro del Consell Valencià de Cultura, nos ha conducido por este recorrido histórico...

LA HERMANDAD DE LA SANTA CRUZ

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Moncho Riquelme, presidente de la Hermandad de la Santa Cruz, nos recibe con una sonrisa. Sabe que todo está preparado; que su gente, la gente del barrio, ha hecho un buen trabajo y todo está preparado para que los cuatro pasos bajen desde la ermita hasta San Nicolás y Alicante se vuelque con ellos.

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Pero, hoy, Moncho ha querido que las protagonistas de nuestra conversación sean las costaleras de la Virgen de los Dolores. Esta noche es su noche. Hace ya 25 años que cada Miércoles Santo cargan a la Dolorosa sobre sus hombros para acompañarla durante uno de los recorridos más duros de la Semana Santa. Ya no hay costalero que pueda dar una lección a Penélope Riquelme, capataz entre 2000 y 2018, y a Laura Tortosa, la mujer al frente desde 2018 de las 96 costaleras de la Dolorosa:

RIQUELME, EMBAJADOR DE ALICANTE

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Si hay alguien en el barrio, en la ciudad, que merecía que se recopilara el legado de su vida, ese es Ramón Riquelme. El cocinero; el hombre que plantó las palmeras de la Rambla; el líder vecinal; el presidente de la Hermandad durante casi 30 años; un referente de las Hogueras, de los Moros y Cristianos y del deporte; el alma de Santa Cruz...

El periodista y escritor Martín Sanz, su autor, no ha podido elegir un nombre mejor para la biografía de un hombre que es historia viva de la ciudad: «Ramón Riquelme: embajador de Alicante».