Una joven de Lloseta que espera un doble trasplante está a punto de ser desahuciada

PALMA

Vanesa Sarró tiene 38 años y vive en Lloseta. Ella y su marido debían abandonar la casa de alquiler en la que viven porque la dueña no quiere renovar el contrato. Hasta aquí, éste es uno de esos cientos de casos que dibujan el drama de la vivienda en Balears. Sin embargo, el testimonio de Vanesa es especialmente grave. Está esperando un doble trasplante y no encuentra un piso en el que vivir. Vanesa tiene diabetes tipo 1 y, mientras llega el trasplante, es probable que tenga que hacer diálisis peritoneal, un tratamiento que debe llevar a cabo el propio paciente en casa y que requiere un espacio con una total higiene. "No pido una casa gratis", explicaba el pasado viernes en Hoy Por Hoy Mallorca, "sino una vivienda que pueda pagar". En este momento está de baja médica y su marido cobra el salario mínimo. 

Después de relatar su caso en Radio Mallorca, y tras varios intentos infructuosos para hablar con el alcalde -el socialista Chema Muñoz-, la asistenta social de Lloseta visitó a Vanessa en su casa el pasado viernes. El Ajuntament del municipio le ha pedido tiempo hasta el viernes para encontrar una solución habitacional para ella y su familia. Su estado de salud y una posible diálisis le impiden que pueda quedarse, de un día para otro, sin un techo en el que vivir.