Sobre el factor gomero

Santa Cruz de Tenerife
Ángel Víctor Torres es consciente de que necesita a los tres diputados de Curbelo para hacerse con la Presidencia del Gobierno de Canarias. De hecho, tras el anuncio realizado ayer por Ciudadanos, confirmando su preferencia por acuerdos con la derecha, la decisión de Curbelo parece clave. El gomero ya puso sus condiciones encima de la mesa, antes incluso de empezar la ronda negociadora de Torres, y –si es cierto lo que ha contado- sus líneas rojas no pasan por la presencia de Podemos en el Gobierno, sino por tres compromisos políticos difícilmente asumibles para la izquierda: primero, contar con grupo parlamentario, algo que requeriría una específica modificación del Reglamento del Parlamento, a la que tanto el PSOE como Podemos y Nueva Canarias se opusieron radicalmente. La segunda, no tocar ni una coma de la Ley de Islas Verdes, una de las obsesiones de Nueva Canarias y Podemos, en la que el PSOE está dividido: la ley es defendida por los socialistas de La Palma, La Gomera y el Hierro, pero no fue apoyada por el PSOE canario. La tercera condición es la más dramática y difícilmente asumible: Curbelo exige el retorno de la triple paridad como mecanismo definidor de la representación. Habría que hacerlo durante el trámite que establece el Estatuto y que debe concluirse en los próximos tres años. Sospecho que aunque el PSOE quisiera suicidarse en Gran Canaria aceptando esa exigencia, ni Podemos ni Nueva Canarias podrían asumirlo. Sin embargo, Torres volvió de su reunión con Sánchez asegurando que estaba autorizado a llegar a un acuerdo con Curbelo. ¿De verdad? ¿De verdad Torres está dispuesto a aceptar las condiciones de Curbelo? Yo creo que son inaceptables para la izquierda, sobre todo la última, el regreso a la triple paridad. Es como si Curbelo las hubiera planteado para hacer imposible un acuerdo con el PSOE. ¿No se ha dado cuenta Torres?
Yo creo que sí. Creo que se ha dado cuenta y gana tiempo.




