El fuego de Tarragona gana la batalla a los bomberos: "Aún no hay ninguna previsión de tenerlo estabilizado"
Emergencias ordena el confinamiento de dos pueblos cercanos al incendio y no descarta nuevos desalojos
Centenares de bomberos luchan contra el incendio / ATLAS
La Torre de l'Espanyol
El incendio forestal de la Ribera d'Ebre, entre las provincias de Tarragona y Lleida, continua desbocado. "No hay ninguna previsión, en estos momentos, de que sea estabilizado. Las condiciones meteorológicas y la orografía del terreno dificultan las tareas de extinción", ha apuntado este mediodía el cuerpo de Bomberos catalán.
Dado el avance de las llamas, la Dirección General de Protección Civil en Catalunya ha lanzado, minutos antes de las tres de la tarde de este jueves, la orden de confinamiento para la totalidad de los vecinos de la localidad de Bovera (Lleida), con un censo de poco más de 250 habitantes. Esta orden se hace extensible también a "ancianos, embarazadas, niños y personas con problemas respiratorios" del municipio de Maials, también de la provincia leridana, con un censo aproximado de 930 vecinos.
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El conseller de Interior, Miquel Buch ha asegurado que "se está cumpliendo el objetivo de la estrategia de los Bomberos con el flanco derecho del incendio. Los Bomberos ha pedido el confinamiento de los habitantes de Bovera por motivos de seguridad. Forma parte de esta estrategia y estamos resolviendo el objetivo".
Los cuerpos de emergencia luchan desde hace más de 24 horas contra el peor incendio forestal registrado en Catalunya "en los últimos 20 años", según apuntó ayer el conseller de Interior, Miquel Buch. Ya han adrido 6.500 hectáreas, según los Agentes Rurales.
La Unidad Militar de Emergencias (UME), tiene desplegados sobre el terreno a un total de 221 efectivos del Terecer y Cuarto Batallón de Intervención de Valencia y Zaragoza, respectivamente. Además, otras comunidades autónomas como Aragón, también están destinando efectivos a la labor de extinción. La Generalitat tiene previsto recibir esta tarde otros dos hidroaviones y dos helicópteros del cuerpo de emergencias de Castilla La Mancha.
Según el último parte de la Generalitat de Catalunya, hay un total de 45 personas evacuadas, pero los cuerpos de seguridad no descartan iniciar el desalojo de los vecinos de Bovera i la Bisbal de Falset que residen en masías aisladas.
