Desarticulada una red especializada en la "canibalización" de armas de fuego para venderlas en el mercado negro
Málaga
Agentes de la Policía Nacional, en el marco de la operación But contra el tráfico ilícito de armas de fuego, han desarticulado en Campanillas (Málaga) un grupo criminal dedicado al tráfico ilícito de armas mediante el procedimiento denominado canibalización, que consiste en crear un arma nueva a partir de piezas procedentes de distintas armas de fuego para su posterior venta en el mercado ilícito. Han sido arrestadas tres personas –dos hombres y una mujer con edades comprendidas entre los 29 y 42 años de edad y nacionalidad española- como presuntas responsables de los delitos de pertenencia a grupo criminal, depósito de armas y tenencia ilícita de armas para el tráfico.
En el trascurso del operativo, que se ha llevado a cabo con la práctica de dos registros domiciliarios -en Campanillas y Antequera-, se han intervenido, entre otros efectos, siete de armas de fuego cortas –seis pistolas y un revólver-, algunas de ellas inutilizadas y con el número de serie borrado, una escopeta con mira telescópica de alta precisión, centenares de piezas para la construcción de armas de fuego -todas empaquetadas en conjuntos individuales para su posterior rearme-, más de un millar y medio de cartuchos de distintos calibres, 150 cargadores, 1.300 pistones, varios calibradores y cañones, además de pólvora. Igualmente se han intervenido 2.200 euros en efectivo.
Operación But: origen y desarrollo
La investigación se inició a raíz de la recepción de una información referente a unas personas, afincadas en la localidad de Campanillas (Málaga), que se dedicarían a la reparación y ensambladura de armas de fuego que posteriormente vendían en el mercado ilícito.
A partir de los datos obtenidos, y a fin de comprobar su veracidad, se estableció un dispositivo de vigilancia en torno al domicilio que estaría siendo utilizado por la red para almacenar las armas en Campanillas. Así, en el trascurso del operativo, el pasado día 26 de junio, los investigadores localizaron el vehículo supuestamente utilizado por dos de los integrantes para trasladar las armas y constataron que los ocupantes del vehículo, tanto en su recorrido como a la llegada de su vivienda, adoptaban importantes medidas de seguridad.
Ante la posibilidad de encontrarse frente a un ilícito penal, los investigadores interceptaron el vehículo. En su interior iban tres personas mayores –que finalmente fueron detenidas tras comprobar su participación en la actividad ilícita- y una menor, hija de uno de los investigados -entregada a su madre-.
Hallazgo en el vehículo
En la inspección del coche, en el maletero, los agentes hallaron una caja conteniendo siete armas de fuego -seis pistolas a las que faltaban los cañones, algunas de ellas con los números de serie borrados, y un revólver, que tras las comprobaciones oportunas resultó que tenía un señalamiento por extravío o robo en vigor desde el 2013-.
Resultado registro vivienda
En el registro en la vivienda de la arrestada se intervino más material para la reparación, fabricación y venta de armas de fuego como una pistola inutilizada junto a numerosas partes de armas por separado como muelles o cachas, calibradores digitales y cuatro cañones de armas de fuego cortas; 1.593 cartuchos, un silenciador, una linterna adaptable a armas cortas, 82 bolsas de autocierre conteniendo cada una de ellas piezas específicas de un arma determinada -cachas, agujas percusoras, gatillos, etc.-, un armazón para convertir una pistola en subfusil; 150 cargadores, una escopeta, 1.300 pistones para cartuchos, cientos de vainas, tres botes con pólvora, así como numerosas herramientas para ensamblar y reparar armas de fuego y maquinaria para la recarga de cartuchos.
Ignacio San Martín
Periodista de Málaga especializado en tribunales y motor. Responsable de 'Autoradio', programa decano...