La judicialización de la política
Si entonces creía que Echávarri cometió un delito de prevaricación, ahora la retirada de la denuncia, aduciendo cuestiones estéticas, deja en mal lugar al propio Barcala
La Columna de Carlos Arcaya | La judicialización de la política | 20/09/2019
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Alicante
Nuestros políticos suelen lamentar lo que denominan 'judicialización de la política', reniegan de la misma y acusan a los otros -nunca ellos- de recurrir a una práctica que, en la mayoría, de los casos tildan de torticera.
El mantra lo habrán escuchado multitud de veces, dicen, el partido de fulanito, nuestro opositor, trata de conseguir en los juzgados lo que no han obtenido en las urnas con los votos de los ciudadanos.
Barcala, que ahora apela a la inoportunidad para retirar la denuncia que presentó contra su antecesor, llegó a asegurar -cuando era líder de la oposición- que Echávarri daba una "imagen patética" ya que "se arrastraba por los juzgados", ante lo cual no le cabía "otra solución que dimitir".
Si entonces creía que cometió un delito de prevaricación al fraccionar 14 contratos por 144.000 euros, ahora la retirada de la denuncia, aduciendo cuestiones estéticas, deja en mal lugar al propio Barcala, porque extiende la duda sobre la intencionalidad de la denuncia.
Ya saben, aquí, nadie judicializa la política.
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