Expulsados de su casa en València para construir apartamentos turísticos

Valencia

Teresa tiene 84 años y lleva viviendo en Ciutat Vella, un barrio céntrico de València, desde 1968. Ahora un fondo buitre ha comprado el bloque de edificios y amenaza con echar a todos los inquilinos para convertirlo en una finca de alquileres vacacionales.

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Este lunes los vecinos han presentado una campaña para intentar evitar un hecho que contribuye a la gentrificación de la ciudad, ese proceso por el que se expulsa a la población local para sustituirla por gente con rentas más altas o por turistas.

Los vecinos anuncian que darán la lucha en los tribunales, aunque no tienen mucha esperanza en que esto les permita conservar su casa. En la mayoría de casos, el fondo que ha comprado el edificio ni siquiera les ha ofrecido una contraoferta para mantener el alquiler: simplemente les piden que se marchen. Jesús Arrúe también vive en esta finca y denuncia que se tendrá que marchar a otro barrio, una zona que está muy lejos de su lugar de trabajo. 

El barrio de Ciutat Vella ha cambiado de arriba a abajo por culpa de esta turistificación. Teresa vive de renta antigua y, aunque a ella no la pueden expulsar, le obligan a marchar de su casa durante varios años para poder reformar el edificio. Ella asegura que no se quiere ir de su hogar, intentará luchar, dice, pero sin muchas esperanzas. 

El colectivo 'Veïnat en perill d'extinció', que ha organizado la campaña contra estas expulsiones, denuncia que no es un caso aislado, sino que viene repitiéndose durante los últimos años en muchos otros barrios de València. Alba Herrero, de esta plataforma, acusa al Ayuntamiento de València de no hacer lo suficiente y anuncia que esta campaña que empieza este lunes se alargará hasta que se solucione el problema porque, asegura, el barrio está saturado.