Propietarios de la Torre Anboto acusan a la constructora de "no respetar el diseño inicial"
Según señalan expertos a RADIO BILBAO, "el proyecto de la torre Anboto ha sufrido dos modificaciones frente al diseño inicial. Señalan en concreto tanto a la constructora como al estudio de arquitectura de Rogers.
Del característico tonos verdes se ha pasado a marrones y han eliminado las aspas de San Andrés, algo característico del premio Pritzker de Arquitectura 2007
Bilbao
La construcción del edificio residencial más alto de Euskadi continúa. Pero, a medida que el inmueble va ganando altura, los compradores de sus viviendas están dando la voz de alarma. El motivo no es otro que el diseño: no es el que se había proyectado y lo que ellos han adquirido sobre plano.
El estudio del prestigioso arquitecto británico Richard Rogers, premio Pritzker de arquitectura diseñó una “elegante torre” de 119 metros con la que se rematará el proyecto de urbanización de los antiguos terrenos del cuartel en Garellano.
Con 36 plantas, 33 de viviendas y 3 de servicios y oficinas, y 198 pisos de precio libre, todos ellos soleados, con mirador o balcón, y vistas "espectaculares", el rascacielos será el edificio residencial más alto en Euskadi.
Sin embargo, las quejas se suceden. Ha habido, lo que se dice en el mundo del diseño, un “restyling”, es decir, un rediseño. Algunos hablan directamente de “lavado de cara” tanto cambios puramente estéticos como estructurales.
Según señalan expertos a RADIO BILBAO, “el proyecto de la torre Anboto ha sufrido dos modificaciones frente al diseño inicial. Y señalan en concreto tanto a la constructora como al estudio de arquitectura de Rogers. Se han modificado los colores, del característico tonos verdes se ha pasado a marrones, han eliminado las aspas de San Andrés, algo característico de Rogers y han añadido barandillas ‘carcelarias’ a las terrazas y reducido el tamaño de las ventanas, entre otras alteraciones.
Según hemos podido saber, muchos de los vecinos se han mostrado muy contrariados porque compraron la vivienda sobre un diseño que no se ha respetado y las culpas supuestamente de algunos cambios son por "ordenanzas municipales".
Critican que “ya no hay tanta superficie acristalada porque lo prohíbe el ayuntamiento” aunque señalan como ejemplo contrario, los casos de Torre Iberdrola o Isozaki, con fachada acristalada y que no sufrieron cambios.
Estos propietarios consideran que el problema ha podido llegar de la constructora Arrasate-Urrutia a quien “le quedan grandes este tipo de proyectos y no son capaces de realizarlos con la memoria de calidades inicial y , lo que puede ser peor, pretenden así ahorrar dinero por el camino”.
Los cambios llegan incluso al volumen del edificio porque se han alargado un metro las terrazas.
En la presentación del proyecto, el edificio estrella de la urbanización de Garellano, el alcalde de Bilbao, Juan Mari Aburto, aseguró que va a aportar "arquitectura de vanguardia y prestigio" a la zona y va a permitir “incorporar el nombre del prestigioso arquitecto británico al panteón de ilustres profesionales que tienen obra en Bilbao”.
Esta operación urbanística con la que Bilbao ría 2000, gestiona de los terrenos, espera disponer de 30 millones de euros por la venta de la última parcela y así ver su deuda a menos de 20 millones de euros.