Los invernaderos abandonados son la primera fuente de vertido de microplásticos al mar en Canarias

Tenerife

La Cadena SER en Canarias ha tenido acceso a la denuncia presentada ante la Dirección General de Protección de la Naturaleza del Gobierno canario por la Sociedad Atlántica de Oceanógrafos, el pasado 25 de septiembre de 2019, debido a la grave situación medioambiental que supone seguir teniendo invernaderos abandonados en las Islas.

La SAO confirma que sigue sin haber un censo sobre cuantas infraestructuras abandonas hay en Canarias aunque se calcula que, por ejemplo, de las 2.500 hectáreas de cultivo de tomate que ha habido en la isla de Gran Canaria, en la última década, se han reducido a unas 600 hectáreas, es decir, las 3/4 de los invernaderos podrían estar en la actualidad abandonados.

El presidente de la Sociedad Atlántica de Oceanógrafos, José Juan Castro, asegura que los plásticos de los invernaderos (PVC y polietileno) abandonados que llegan al mar se ha convertido en "la primera fuente de vertido de microplásticos en las Islas" y recuerda que nos encontramos ante un "hecho delictivo" porque la ley obliga "desmantelar" este tipo de infraestructuras cuando dejan de dar uso (Ley del Suelo de 2017).

Las sanciones, por ley, pueden superar los 60.000 euros. Unas sanciones que no se están aplicando hasta el punto, asegura Castro, de que "existen ayuntamientos en las islas que delante tienen invernaderos abandonados". El presidente de la SAO recuerda además, que muchas de estas infraestructuras "han recibido subvenciones" por parte de Europa como elemento productivo y con la obligación de "impacto ambiental cero", sin embargo, hay propietarios que "no hay cumplido esa parte del contrato", explica.