Acuerdo entre la Fiscalía y los acusados por el accidente del metro de València

Valencia

La Fiscalía y los ocho acusados por el accidente del metro de València de 2006 han llegado a un acuerdo de conformidad, al que se ha sumado la acusación particular al que ejerce la Asociación de Víctimas del Accidente, para evitar el juicio que está previsto que comience el lunes.

El acuerdo, que ha avanzado el diario Las Provincias, y ha confirmado la Cadena SER, implica el reconocimiento de la mala praxis que, según los familiares de las víctimas estuvo detrás del accidente. En una primera valoración, la presidenta de la Asociación de Víctimas del Accidente de Metro, Rosa Garrote, lo considera una buena noticia porque implica el reconocimiento de que las cosas se hicieron mal.

Los cuatro exdirectivos admiten que las cosas se hicieron mal, que mintieron en alguna parte del proceso. Y esto es lo más importante para Rosa Garrote que asegura, en declaraciones a la SER, que es tiempo de cerrar una etapa, de volver a la normalidad.

Condenas de 22 meses

Los términos del acuerdo aún no los conoce la asociación de víctimas que está convencida de que no todo será de su agrado. Pero este acuerdo supone el punto y final de una lucha. Este pacto supone la retirada de la acusación para Marisa Gracia, la ex gerente de y tres acusados más. Los otros cuatro acusados verían reducida su pena hasta los 22 meses de cárcel, frente a los tres años y siete meses de prisión que pedía la Fiscalía.

Esta semana, los tres presidentes de la Asociación de Víctimas, se reunieron en Hoy por hoy Locos por Valencia para hacer balance de todos los años de lucha y hablar sobre el juicio que estaba por venir. Aseguraron que estaban "esperanzados" por conseguir responsabilidades penales, ya que las políticas ya se habían asumido cuando el nuevo Consell llegó al poder en 2015. 

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Largo proceso judicial

El juicio de este lunes era el final de un proceso que se ha llegado a archivar hasta en tres ocasiones, por parte de la instructora, que consideraba que el único responsable era el maquinista fallecido. Una tesis que no ha cambiado a lo largo de estos años: el accidente ocurrió como consecuencia de un exceso de velocidad y todos los parámetros de seguridad eran correctos. Tras varios recursos de las víctimas, la Audiencia Provincial ordenó la reapertura del caso sobre un accidente que ahora, se demuestra, sí que tuvo responsables.

El siniestro ocurrió el 3 de julio de 2006 en la Línea 1 de Metrovalencia, en el tramo entre Plaza de España y Jesús, en una curva del trayecto en el que descarriló una de las dos unidades, la UTA 3736. Como consecuencia, fallecieron 43 personas, incluidos el maquinista y la interventora, y resultaron heridos 47 pasajeros, 38 con necesidad de tratamiento médico o quirúrgico. 

El nombre de la estación, en época del PP, se cambió por el de 'Joaquín Sorolla', aunque con la llegada del Botànic al Consell se recuperó la denominación original.