"La idea sale de un vídeo hiper machista de Whatsapp, y yo no hice nada"
Del 2 al 15 de marzo en el Atrio de las Culturas 'Macho Man' de Heartbreak Hotel, la última propuesta del dramaturgo Àlex Rigola
Fernando Pérez, Nekane Alonso y Álex Rigola / Cadena SER
Bilbao
Álex Rigola nos ha explicado cómo nació la idea de este montaje. ¿Quieres escucharlo?
Álex Rigola en Álhondiga Bilbao
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La dramaturgia de 'Macho Man' se ha desarrollado desde lo colectivo, con un equipo dirigido por el propio Àlex Rigola. Tenían claro cuál tenía que ser el enfoque: centrado en las mujeres y no en los agresores. En una de las salas, donde el espectador está rodeado de fotografías de víctimas de violencia de género, el impacto emocional que se produce explica esta decisión: ahí, frente a la presencia de otros cuerpos que ya no están, la empatía es inmediata. El efecto hubiera sido distinto si se hubiera mostrado a los verdugos.
Querían mostrar la herida abiertamente. Como señala Rigola, "hay algo perverso en la acumulación de noticias relacionadas con este tipo de agresiones. Todos nosotros, como espectadores y lectores, acumulamos datos que paradójicamente nos hacen perder la noción de presente y de realidad tangible.
La voz de una víctima, guía a las personas visitantes por el recorrido laberíntico de este artefacto dramatúrgico compuesto por 12 habitaciones, que se vuelve profundamente terrorífico porque todo lo que nos muestra es real. Son reales los datos, las sentencias, las declaraciones y las preguntas que formula y son reales también las conversaciones y los testimonios que nos narran.
Para levantar este proyecto que propone otras formas de narración a través de la fusión de artes, Àlex Rigola precisó de 10 meses de exhaustiva documentación y del asesoramiento de la psicóloga Alba Alfageme.
La experiencia escénica interactiva Macho Man es todo un viaje escénico, experimental y emocional que quiere concienciar sobre la violencia machista en la pareja, en la familia y en los entornos laboral, social y judicial: “Con este proyecto buscamos nuevas maneras de tomar conciencia del machismo extremo mediante la fusión de los conocimientos en artes escénicas, artes plásticas, psicología y documentación.
Así, durante un recorrido que ocupa aproximadamente 50 minutos, grupos de seis personas máximo, pasearán, leerán, escucharán e interactuarán con los objetos que vayan encontrando y con los demás participantes porque en Macho Man las reacciones del público también se convierten en parte de la experiencia.
Es un viaje que remueve emocionalmente, que conmociona a las personas espectadoras, “la gente sale más tocada de lo que esperábamos”, señala Rigola.
LA EDUCACIÓN COMO VÍA DE SOLUCIÓN
Macho Man es también una experiencia educativa y por eso se abrirá a centros escolares, buscando generar diálogo y reflexión porque, como indica Rigola, “la violencia machista es un problema social grave que deber desaparecer y la mejor forma para que lo haga es a través de la educación
Al ser una instalación que contiene testimonios reales de violencia machista puede herir la sensibilidad de algunas personas y no está recomendada para personas menores de 15 años.
