El Ayuntamiento de València aprueba por consenso las medidas para combatir la crisis del coronavirus

Valencia

Con solo nueve concejales de forma presencial, otros cuatro participando por videoconferencia, y con numerosos problemas técnicos. Así se ha celebrado este jueves el pleno ordinario más extraordinario del Ayuntamiento de València. Un pleno que ha dejado una imagen de unidad de todos los partidos sobre la crisis del coronavirus: la oposición ha decidido apoyar la moción del gobierno local sobre la materia, aunque con críticas duras a la falta de previsión y a la improvisación con la que, según PP, Ciudadanos y Vox, está actuando el ejecutivo municipal.

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La medida aprobada es una modificación de crédito que pretende ayudar a las familias y las empresas que se hayan quedado sin ingresos. Además de ayudas directas a los autónomos de hasta 7.000 euros, se aplaza el pago del IBI y se eliminan otros como el de ocupación de la vía pública. La oposición ha respaldado estas medidas, pero pide ir más allá y parar la subida de impuestos prevista para este año.

La portavoz del PP, María José Catalá, le recuerda al alcalde que la mano tendida de su partido "no es un cheque en blanco" y le pide a Ribó que cambie su actitud y deje a un lado su ideología "por el bien común".

Desde Ciudadanos, su portavoz Fernando Giner, que ha intervenido desde casa, cree que esta crisis era previsible. Recuerda que su formación ya avisó en febrero y que el gobierno local no le quiso escuchar. Critica también la falta de coordinación y planificación que, a su juicio, existe entre Compromís y PSPV.

Y el portavoz de Vox, José Gosálvez, también por videoconferencia, se ha sumado a las críticas asegurando que su partido tenía razón cuando pedía el cierre de fronteras. Pide un frente común de todos los partidos y advierte al alcalde que ahora es cuando ha llegado "el momento de rescatar personas".

Ribó defiende su actuación

El alcalde Ribó ha detallado las actuaciones que se han llevado a cabo desde el Ayuntamiento en las últimas semanas y ha defendido que estas son las medidas "adecuadas". Ribó insiste en que la crisis económica que vendrá tras el estado de alarma será muy grave y pide rigurosidad y disciplina en el cumplimiento de las medidas, pero "sin pasarse" porque, si no, los efectos económicos "serán peores". El alcalde cree que el Ayuntamiento no ha actuado con improvisación, sino con proporcionalidad y mantienes que en València, y en la Comunitat Valenciana, las cosas se están haciendo "mucho mejor que en otras partes de España".

La vicealcaldesa Sandra Gómez, del PSPV, reconoce que la pandemia ha cambiado todas las previsiones del Ayuntamiento y, por eso, anuncia que, si es necesario aprobar unos nuevos presupuestos, se hará. Pide a la oposición que esté a la altura de las circunstancias porque, dice, ya habrá momento para el debate pero, ahora, "es el momento de la unidad".

Y sobre la petición de la oposición de ir más allá en materia económica, el concejal de Hacienda Ramón Vilar recuerda que esto "no es una apuesta a ver quién da más" y advierte de que hay que tomar medidas de forma escalonada para ir más allá, si la situación empeora.