De momento, lo sensato es no hacerse ni hacer falsas expectativas
Entiendo la preocupación de muchos festeros y de quien vive de la fiesta; habrá que ayudarles y mantener vivo ese espíritu para cuando se pueda volver a ocupar las calles...
La Columna de Carlos Arcaya: No hacerse falsas expectativas
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Alicante
El revuelo provocado por la contestación de la consellera Barceló es más -supongo- fruto de la constatación de lo que es una realidad que se va a prolongar, aunque no nos guste, que de lo previsible que era la misma.
No es lógico que ahora pensemos en que se van a poder celebrar fiestas populares. Acaba de comenzar una campaña de vacunación masiva de la gripe para evitar que nuestro sistema de salud se pueda colapsar. Pese a la reducción de la incidencia, no podemos bajar la guardia en ningún momento, fíjense lo ocurrido en un colegio mayor de Valencia. No sabemos si habrá una tercera ola.
Y esas son las incertidumbres a corto plazo; a más largo plazo, veremos. De momento, el 80 % de los brotes son sociales.
El virus ha llegado para quedarse hasta que tengamos un tratamiento efectivo o una vacuna. Entiendo la preocupación de muchos festeros y de quien vive de la fiesta; habrá que ayudarles y mantener vivo ese espíritu para cuando se pueda volver a ocupar las calles, pero, de momento, lo sensato es no hacerse ni hacer falsas expectativas.
Y por cierto, no solo hablamos de fiestas. Hay otras celebraciones más cercanas, como por ejemplo, las cabalgatas de Reyes Magos, que supongo que tampoco ningún ayuntamiento querrá organizar.
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