S'Estanc Vell de Vilafranca. Fem un Variat!

Vilafranca de Bonany

Este templo del variat situado en Vilafranca de Bonany abrió sus puertas en abril de 2005. Su nombre, tal y como explica sin intentar esconder un orgullo bien merecido su gerente y propietario, Pere Garí Ferriol, viene de cuando allí se ubicaba un estanco: “Fue el primer estanco que hubo en Vilafranca, que permaneció abierto desde principios del siglo XX hasta mediados de los años 40”. Desde entonces, el local permaneció cerrado muchos años hasta que en 2005, cuando lo cogió Pere Garí, lo sometió a una reforma y se convirtió en el restaurante que es hoy en día, que regenta como negocio familiar junto a su hermana Maria.

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Pere reconoce que S’Estanc Vell “siempre ha sido un templo del variat”, una especialidad culinaria que, según detalla. “en nuestra casa recoge el testimonio de dos locales míticos del pueblo, el Bar Amengual, que ya no existe, y el Bar Can Pujol”, que era de una tía suya y actualmente “ya no se prepara este plato”. A partir del que ofrecían ambos años atrás “nosotros hacemos una fusión”. Reconoce Pere Garí que la apuesta por el variat de S’Estanc Vell “es de tipo sentimental”, y que le trae “recuerdos de infancia, de cuando tenía cuatro o cinco años. De pequeño -explica- iba siempre a casa de mis tíos a comer el variat y he querido continuar con la tradición para seguir teniendo estos recuerdos cerca”. Todavía recuerda con mucho cariño, los exquisitos champiñones que preparaba su tía. “¡Me encantaban!”, asegura.

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El variat que elabora S’Estanc Vell incluye ensaladilla rusa, hígado, champiñones, albóndigas pequeñas, pica pica de sepia y calamar a la romana. Lo preparan siempre los domingos y, como particularidad, nunca lo calientan en el microondas, como hace la mayoría de locales. Aquí lo sirven directamente de unas vitrinas que mantienen calientes los platos.

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Publicación de El llibre del variat mallorquí. Redacción: Aina Solano/ Fotografías: Cristina Ortega/ editado por Disset Edició y Radio Mallorca