Lo que se juega la Universidad

Bilbao

Soy exalumna de la UPV-EHU, como más de 300.000 personas. El caso es que me ocupa y me preocupa lo que pase en la Universidad Pública Vasca, sin ir más lejos, las elecciones a rectora de hoy.

Se está dando por sentado que Eva Ferreira saldrá designada rectora a última hora de la tarde, porque es la única candidata al puesto. Solo por haber dado el paso al frente merecería ser elegida, pero no. No está hecho, ni mucho menos. No se le puede votar en contra, solo sí o en blanco. Pero por Estatutos, necesita el apoyo de un tercio de los votos emitidos para ser elegida.

Si, de por sí, no suelen ser unos comicios que levanten pasiones (ha habido abstenciones superiores al 90 por ciento); no hay adversario (puede interpretarse que el pescado está vendido); y tenemos con la pandemia a parte de la Universidad teletrabajando, ya ven los riesgos. Repetir el proceso implicaría una interinidad de varios meses, como ocurrió en 2009. Enfrentarse descabezada a un contexto de crisis.

48.000 personas están llamadas a las urnas. Esto es lo que está en juego hoy en la Universidad pública.