Sant Antoni ofrecerá electricidad limpia y a precio de coste a los vecinos del municipio

Ibiza

El vicepresidente y conseller de Transición Energética, Sectores Productivos y Memoria Democrática, Juan Pedro Yllanes, ha presentado hoy el primer proyecto de autoconsumo compartido que instalará el Govern a través del Instituto Balear de la Energía (IBE) en Ibiza para ofrecer un consumo energético compartido a vecinos, empresas y espacios municipales, procedente de energías renovables.

El proyecto de energía fotovoltaica, de 100 kW de potencia, se instalará encima de la cubierta del centro educativo Cervantes, en una superficie de 1.400 m². Se trata de uno de los proyectos de autoconsumo compartido más grandes que impulsa el IBE en estos momentos y ofrecerá electricidad limpia y a precio de coste a diferentes espacios municipales, entre ellos el mismo CEIP Cervantes, una setentena de familias y una decena de pequeñas y medianas empresas, ubicadas en un radio de 500 metros de esta instalación —distancia que cubre prácticamente todo el núcleo de Sant Antoni—.

Además, se trabajará con el área de Servicios Sociales del Ayuntamiento para que familias de colectivos vulnerables se puedan beneficiar de las ventajas sociales de este proyecto.

«Avanzamos hacia un acceso más igualitario a la energía, hacia su democratización», ha señalado el vicepresidente Yllanes, que ha destacado los beneficios sociales de estos proyectos de autoconsumo compartido «para que la gente pueda acceder a energía limpia, producida por placas solares; barata, porque los usuarios pagarán el kilovatio a precio de coste; y de kilómetro cero, porque esta energía se produce en un radio de 500 metros de su casa. Además, tendrán prioridad aquellas personas que se encuentren en una situación de vulnerabilidad. Por ello quiero animar a ayuntamientos y consells a ceder espacios para proyectos de este tipo, porque este es un programa que quiere expandirse en los próximos años y llegar al máximo de municipios posibles».

La inversión es de 157.000 euros. La instalación fotovoltaica producirá 150.000 kWh/año, con lo que se dejarán de emitir 112.500 kg de CO2 anuales. Se prevé que el proyecto esté ejecutado este otoño.