Montxu Miranda, récord de pértiga desde hace 21 años
El atleta de Santurtzi vio frenada su carrera por culpa de las lesiones y hoy es entrenador en Ortuella
Montxu Miranda, former pole vaulter, speaks after the screening of the documentary "8'56 Yago Lamela" during the FICA International Athletics Film Festival on November 04, 2019 in San Sebastian, Spain / Getty Images
Bilbao
Dentro de apenas tres meses, el récord de España de salto con pértiga cumplirá veintiún años en poder del bizkaino Montxu Miranda. El atleta de Santurtzi estableció su marca, de 5.81 metros, durante los estatales de 2000, celebrados en el Estadio Olímpico de Montjuic poco antes de los Juegos Olímpicos de Sidney. La historia de Miranda es la de alguien nacido para este deporte, pero también la de un atleta lastrado por las lesiones.
Con una estatura por encima de 1.90 metros, parecía destinado a triunfar. Y lo hizo. Tanto que, a día de hoy, nadie ha conseguido batirle. Él lo hizo con el registro de José Manuel Arcos, que había saltado 5.76 metros en 1996 en Madrid. El dos de septiembre de 2000, Montxu Miranda superó en cinco centímetros dicha marca al tercer intento. Él fue la cara y Arcos, la cruz. El madrileño fracasó por triplicado con el salto de 5.41 metros y tuvo que regresar a casa sin marca.
La carrera de Miranda había comenzado a destacar en 1997, cuando, bajo la dirección técnica de Javier Navas, consiguió la medalla de plata en el europeo sub-23 con un salto de 5.50 metros. Ya en categoría absoluta, fue cuarto en el europeo de sala de Valencia, sexto en los Mundiales en pista cubierta de Lisboa y noveno en la final olímpica de Sidney. Las tres veces, con la misma marca: 5.70 metros.
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Fue cinco veces campeón de España al aire libre y tres en pista cubierta. En Mundiales al aire libre, sin embargo, su palmarés está desierto por culpa de las lesiones. Ni en Atenas 1997 ni en Sevilla 1999 pudo competir debido a distintos problemas físicos. Y fue precisamente una lesión, en concreto, de columna, la que le obligó a dejar el atletismo en 2001. Consiguió volver, pero la fatalidad le acompañó de nuevo: primero se rompió el ligamento de un tobillo, luego sufrió una rotura muscular y después, durante un salto, la pértiga le provocó una fisura en las costillas que le apartó de los JJOO de Atenas 2004.
Se retiró definitivamente en 2007 y desde entonces ha participado, eso sí, en competiciones de veteranos. Actualmente es entrenador de salto con pértiga y preparador físico en Ortuella. Y sí, también es récord español de salto con pértiga. Es más, en las últimas dos décadas ningún atleta español se ha atrevido tan siquiera a intentar arrebatarle la marca poniendo el listón por encima de los 5.81 metros.
