Bares con barra y restaurante

Logroño

Volvemos a visitar nuestra calle de pinchos más reconocida internacionalmente. Y lo hacemos para acercarles otras propuestas en la Calle Laurel. Hoy les mostramos a través de las ondas lugares con barras llenas de apetecibles pinchos y que además, también nos ofrecen un servicio de comedor.

Nuestra primera parada nos lleva hasta el Mesón Charro donde Rubén Jiménez está al frente de este establecimiento con mucha historia en la gastronomía logroñesa que, después de tres años cerrado, ha conseguido recuperar y revitalizar con una pandemia de por medio incluida.

Todas los días nos cuenta que ofrecen "un menú para comer con entrantes, cinco primeros y cinco segundos y con postre por 25 euros". Es cocina tradicional con "algún toque" pero básicamente "cocina tradicional de producto que compramos en la plaza de Abastos". En la barra destaca "el salchichón asado con chimichurri de cilantro" y si le pedimos algo no nos podamos perder, no lo duda: "unas chuletillas a la brasa".

Después de abrir el apetito nos colamos en El Rincón de Alberto, que dentro de poco cumplirá cinco años en este nuevo local. "Intentamos ofrecer a nuestros clientes producto de temporada y de lo que mejor podemos encontrar en el mercado", dice Alberto Andrés, antes de contarnos que esta pasión por la hostelería le viene de familia ya que sus padres tenían un local en Burgos y tras pasar "por una buena casa como el Echaurren con grandes referentes como Marisa, Francis y Chefe" ha ido construyendo su propio concepto de restaurante.

"Intentamos hacer cocina de producto y tocarlo lo menos posible", cuenta Alberto porque "el buen producto es fácil fastidiarlo y dificil conseguirlo". Destaca que los "productos estrellas cambian según la temporada" como los pimientos de cristal, boletus o el chuletón gallego.