Realizan la voladura controlada de un proyectil con 14 kilos de TNT en La Graciosa
Tenía capacidad para destruir la mitad del muelle de La Graciosa y afectar a las viviendas e instalaciones anexas
Tenía capacidad para destruir la mitad del muelle de La Graciosa y afectar a las viviendas e instalaciones anexas / Cadena SER
La Graciosa
El Tedax de la Guardia Civil de Lanzarote ha realizado una detonación controlada en La Graciosa que se encontraba semienterrado en la explanada del muelle. Los hechos se iniciaron a raíz del hallazgo de otro proyectil, colocado como adorno, en la puerta de una casa de la calle La Galera y que también contenía carga explosiva.
Por su parte, para la detonación fue necesaria la evacuación de todo el muelle y establecimientos cercanos, así como un cordón de seguridad de más de 150 metros. En la primera explosión de seguridad, el alote del proyectil salió disparado hacia el mar. Cabe destacar que este artefacto contenía 14 kilos de TNT, capaces de destruir la mitad del muelle de La Graciosa y afectar a las viviendas e instalaciones anexas.
La Guardia Civil apuntó, que en días anteriores, por parte del GEDEX de la Guardia Civil de Lanzarote, se procedió a retirada de un proyectil de grandes dimensiones que se encontraba la calle La Gatera de La Graciosa. Los hechos fueron alertados ante la Policía Local por un ciudadano, por lo que se procedió inmediatamente al acordonamiento de la zona y dar posterior aviso al cuartel de la Benemérita de Costa Teguise.
Por su parte, cuando el Grupo de Especial de Desactivación de Explosivos llegó al lugar de la incidencia, con la colaboración del policía local, se certificó que se trataba de un obús de 550 mm de largo y 210 mm de calibre, con un peso de unos 60 kilogramos, el cual estaba completamente pintado, por lo que no se pudo observar ninguna leyenda ni color del cuerpo.
Debido al gran peligro que puede ocasionar este tipo de municiones, en su interior puede tener hasta 14 kilogramos de explosivo, se decidió proceder a su traslado a una zona aislada para realizar una explosión controlada.
Una vez trasladado el artefacto fuera del núcleo poblacional, se tomaron todas las medidas de seguridad oportunas proceder a su trepanación mediante una explosión controlada.
En el interior de este proyectil no se encontraba explosivo alguno, si bien con carga podría causar daños letales a varios metros de distancia. Este tipo de proyectiles eran utilizados por el ejército y pudiera tratarse de la batería que estaba ubicada en el Mirador del Río.