Avanzan los trabajos para conocer el estado real de los frescos renacentistas de la Catedral de València
En esta primera fase de la restauración los trabajos se centran en analizar dónde está la causa del problema para, además de restaurar los frescos, evitar que vuelvan a estropearse
Trabajos actuales desde la plataforma flotante en el interior del presbiterio de la Catedral. / Catedral de València
Valencia
La Catedral de València está a la espera de los primeros resultados del análisis que un equipo de especialistas está realizando a los frescos renacentistas situados en la bóveda de la seo. Se trata de unos ángeles músicos que fueron descubiertos en 2004, después de permanecer más de 300 años escondidos sobre el techo de la Catedral y que, a pesar de que fueron restaurados, ahora vuelven a sufrir humedades. En esta primera fase de la restauración los trabajos se centran en analizar dónde está la causa del problema para, además de restaurar los frescos, evitar que vuelvan a estropearse en el futuro.
Para ello se han montado dos andamios en la Catedral, con una plataforma flotante que permiten mantener las misas y las oraciones en el espacio habitual: uno dentro de la bóveda y otro en el exterior. El equipo multidisciplinar está dirigido por el arquitecto Salvador Vila, y ya ha realizado las primeras catas que se han enviado al laboratorio. También se está empleando tecnología de infrarrojos y de rayos X para determinar dónde están las afloraciones salinas y en qué cantidad. Una vez terminada la investigación, se redactará el proyecto de restauración de los ángeles músicos, que tendrá que ser aprobado por la Dirección General de Cultura pero que sufragará la Catedral.
Salvador Vila (arquitecto Catedral de València): "Se va a montar una infraestructura muy importante"
00:29
Compartir
El código iframe se ha copiado en el portapapeles
<iframe src="https://cadenaser.com/embed/audio/460/1627728014741/" width="100%" height="360" frameborder="0" allowfullscreen></iframe>
Unas pinturas con alto valor histórico
El equipo está formado por un grupo de jóvenes restauradores de la Facultad de Bellas Artes y físicos de la Universitat Politècnica de Valencia que están analizando este “tesoro artístico”. Y es que el canónigo conservador del Patrimonio Artístico de la Catedral, José Verdeguer, resalta la importancia y calidad de estas pinturas, que justifican esta restauración porque no se puede perder ningún detalle de los frescos. La intervención se está desarrollando tanto en el interior del presbiterio, desde la plataforma flotante, como desde el exterior, en donde se han colocado andamios y una sobrecubierta metálica.
José Verdeguer (conservador de la Catedral de València): "Un tesoro así no se puede dejar en el olvido"
00:27
Compartir
El código iframe se ha copiado en el portapapeles
<iframe src="https://cadenaser.com/embed/audio/460/1627727973689/" width="100%" height="360" frameborder="0" allowfullscreen></iframe>
Los frescos de los ángeles músicos son pinturas de la segunda mitad del siglo XV realizadas por los artistas italianos Francesco Pagano y Paolo de San Leocadio en la primera bóveda gótica de la Catedral y fueron hallados el 22 de junio de 2004 durante las obras de restauración del altar mayor de la seo, después de permanecer más de 300 años ocultos tras la bóveda barroca que fue retirada.
El restaurador del equipo, Javier Catalá, detalla que ahora mismo los trabajos se encuentran "en la fase de investigación, intentando valorar y descubrir la problemática que afecta a las pinturas murales que fueron restauradas en 2004 tras su hallazgo y en las que, tras todos estos años, han aparecido sales - en algunos puntos concretos en mayor cantidad de la que se podía esperar".
También se ha montado un andamio en el exterior para realizar las catas y conocer el origen de las humedades que afectan a los frescos de los ángeles músicos. / Catedral de València
Las sales que tienen actualmente estas pinturas, como consecuencia de la humedad, no ponen en peligro a corto plazo la integridad de los frescos pero sí que afectan a su apariencia. Es el mismo problema que ya apareció en 2004 y por eso la Catedral quiere buscar el origen de las humedades para evitar que sea necesaria una tercera restauración.
