INECA alerta de la pérdida de competitividad de la provincia de Alicante
El instituto de Estudios Económicos de la provincia de Alicante ve necesario que el proceso transformador y digital se extienda al conjunto de la economía productiva e industrial de la provincia
Alicante
INECA ha hecho público hoy su informe de coyuntura socioecómica de la provincia del segundo trimestre del año. El Instituto de Estudios Económicos de la provincia de Alicante mantiene que el ritmo de la recuperación en la provincia es menos intenso que en otros territorios y ve necesario que el proceso trasnformador y digital se extienda al conjunto de la economía productiva e industrial de la provincia.
El presidente de INECA, Rafael Ballester, mantiene que es importante aprovechar los referentes que ya destacan en los sectores agroalimentario, textil, calzado, componentes, mueble o diseño, entre otros, para el impulso del ecosistema digital iniciado en la provincia y paralizado durante la pandemia por la covid-19.
Destaca el descenso del desempleo y el aumento de la afiliación a la seguridad social, si bien pone el acento en el ritmo de crecimiento, lo que hace que la provincia pierda peso en la economía nacional y competitividad frente a otros territorios.
Rafael Ballester: "La provincia de Alicante pierde competitividad respecto a otros territorios"
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Ballester considera que los proyectos planteados por las distintas administraciones son necesarios y "sin duda pueden contribuir a la mejora socioeconómica", pero añade que aún están en fase de estudio y es difícil percibirlos como activos realistas.
Puntualiza que el informe refleja un dato que supone una inflexión respecto a la tendencia de los depósitos en la provincia de Alicante. Hasta junio de 2021, los depósitos (ahorro) en la provincia no hacían más que crecer, superando al crédito. Sin embargo, “la crisis derivada de la pandemia ha invertido la tendencia, con una reducción considerable en lo que llevamos de año, lo que implica que muchas familias y empresas han tenido que echar mano de recursos propios para sobrellevar la delicada situación económica.
Concluye que a nivel empresarial esto es un importante hándicap que requerirá varios años de ajuste, pues ·lo normal es que, a corto y medio plazo, las compañías se centren en reequilibrar sus balances, en el mejor de los casos, aparcando inversiones para más adelante".
Por su parte, Francisco Llopis, director de Estudios de INECA, explica que se observa una tendencia creciente en la constitución de nuevas sociedades mercantiles y en el primer semestre se iguala el mismo número que en 2021. La reactivación es positiva, señala, si bien menos intensa que en el conjunto de España, perdiendo peso la provincia y situándose en el 4,6 por ciento.
Por el lado de las disoluciones de sociedades, el período recoge un significativo aumento respecto al pasado año. En concreto, el segundo trimestre del 2021 anota un ascenso anual del 160 por ciento, 213 empresas frente a las apenas 82 del mismo periodo del 2020. Estas cifras ya nos advierten, afirma, que comienzan a aflorar las verdaderas consecuencias de la pandemia, pues hasta ahora los empresarios han intentado mantener sus unidades productivas, aunque fuera con niveles mínimos de actividad.
Una vertiente donde la mejora provincial es mejor que la nacional, concluye, viene del dato del número de trabajadores afiliados a la Seguridad Social e incide en que la provincia lleva más de una década de transformación y aún está pendiente de definir su futuro económico con proyectos que todavía "no han aterrizado".