El "cristo" de Aimar Olaizola con las entradas de su último partido: "¡Necesitaría 4000 asientos!"
Aimar Olaizola se despide este fin de semana del frontón Bizkaia con un partido que forma parte de la gira que desembocará en su retirada el 13 de noviembre en Goizueta
El "cristo" de Aimar Olaizola con las entradas de su último partido: "¡Necesitaría 4000 asientos!"
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Bilbao
Aimar Olaizola se despide este domingo del frontón Bizkaia de Bilbao. Y ha elegido hacerlo enfrentándose a Mikel Urrutikoetxea -sus escoltas serán Jon Ander Albisu y Ander Imaz-. El de Zaratamo fue el zaguero con el que Aimar se caló su última txapela de la máxima categoría.
Fue en el Parejas de 2016. Desde entonces ha transcurrido un lustro, pero la amistad entre ambos sigue. "Desde que empecé a entrenar con Asegarce hicimos una gran amistad. Nos conocemos desde hace quince años y siempre me ha dado grandes consejos", apunta Mikel.
"En Bilbao, y en Bizkaia en general, he jugado un montón de partidos y la gente me ha mostrado muchísimo cariño. Siempre me he sentido muy cómodo allí y este domingo iré encantado a jugar allí", reconoce el de Goizueta.
Aquel partido de 2016 lo ganaron Aimar y Mikel, pero no lo hicieron sumando 22 tantos. Solo necesitaron 16. Enfrente tenían a Juan Martínez de Irujo y Beñat Rezusta, que habían sumado diez cuando el delantero de Ibero se lesionó. Sufrió una fractura en un dedo al ir a restar una pelota al ancho. Y nunca volvió a vestirse de blanco.
Meses después de aquella lesión, Juan contó en una rueda de prensa en plenos sanfermines que no volvería a hacerlo. Una afección cardíaca le obligó a retirarse, con lo que la final del Parejas de 2016 fue la última txapela de Aimar y el último partido de Juan.
También fue protagonista Aimar Olaizola de otra retirada: la de Julián Retegi. El navarro disputó su último partido como profesional en septiembre de 2001 en el Adarraga de Logroño. Fue un encuentro de parejas: Retegi-Barriola contra Olaizola II-Armendariz. "Jugaba todas las finales y ganaba casi siempre cuando yo era pequeño. Por eso siempre ha sido un referente para mí", recuerda Aimar sobre Julián.
