Certificado Covid en la restauración: "Quitar mesas no hace que se reduzca el aforo de un local"

Ibiza

Locales que han tratado de esquivar la normativa reduciendo el número de mesas, pese a tener un aforo para más de 50 personas y establecimientos que tenían que pedir el certificado Covid a sus clientes y no lo han hecho. Son los principales incumplimientos que ha detectado la Conselleria balear de Presidencia tras la aprobación de las nuevas medidas para frenar la expansión del coronavirus. En concreto en la ciudad de Ibiza se han levantado 3 actas con propuesta de sanción: dos a cafés concierto y una más a un local de los pasajes del Puerto.

La consellera balear de Presidencia, Mercedes Garrido, que ha pasado por el programa 'Hoy por Hoy para Ibiza y Formentera', dice que hasta ahora no ha habido incidencias destacables porque las policías se han centrado en realizar labores informativas, aunque advierte de que la estrategia cambiará a partir de ahora y serán más estrictos con el cumplimiento de las medidas sanitarias.

Garrido explica que las herramientas, tanto los lectores de códigos QR como la web con la base de datos de los ciudadanos, están funcionando correctamente. De todas formas recuerda que se pueden utilizar otras páginas gratuitas, siempre y cuando no registren los datos del usuario.

Garrido recuerda que las sanciones para los locales que incumplan la normativa sanitaria pueden alcanzar los 600.000 euros y que tratar de falsificar el documento de vacunación o el DNI se considera un delito grave y puede conllevar penas de cárcel.

Desde el Govern explican que la petición del certificado ha animado la vacunación en las islas. Durante el fin de semana se han inoculado más de 5.000 dosis.

Reacciones en el ocio y la restauración

En el sector de la restauración insisten en que el control del certificado Covid es una medida discriminatoria si no se aplica por igual a todos los locales y dicen que ya está teniendo efectos en forma de cancelación de reservas, sobre todo de grupos grandes, que no quieren dejar fuera a comensales que no se hayan vacunado.

La presidenta de PIMEEF Restauración, Verónica Juan, sí reconoce que la gran mayoría de los clientes están concienciados y cumplen, por lo que esta normativa es un mal menor si evita que se vuelvan a aplicar restricciones al sector.

En la misma línea se pronuncian los empresarios del ocio nocturno. Pepe Colomar, de la Asociación de locales del West End, dice que no ha habido incidentes hasta el momento, solo algún cliente despistado que creía que el certificado de vacunación era suficiente para acceder al local y tuvo que descargarse el documento en el mismo momento de entrar al pub. También ha habido que hacer un esfuerzo, dice, en materia de personal, para contar con controladores de acceso.

Colomar explica que, al menos de momento, no ha habido un mayor control policial en Sant Antoni para garantizar el cumplimiento de la normativa sanitaria.