El Baskonia vuelve a sonreir en la Euroliga

Vitoria

El Baskonia sigue montado en la buena ola y desarboló en la segunda parte a un Asvel que incluso pareció vulgar. La madre de Jayson Granger estuvo en el Palau el domingo y los vitorianos superaron al Barcelona. La madre de Simone Fontecchio, Amalia, presenció el choque ante los franceses y su hijo fue uno de los artífices del despegue en el tercer cuarto con tres triples en momentos clave. El club tendrá que plantearse pagar viajes a las progenitoras de sus jugadores.

El equipo vasco estaba atascado en las 4 victorias. Sólo había conseguido un triunfo en los últimos siete partidos y había preocupación en el Buesa. La derrota en Kaunas con el Zalgiris, colista, hizo mucho daño a la moral azulgrana. Tampoco llegaba un Asvel Villeurbanne para tirar cohetes ya que venía de caer en la competición local con el Mónaco con un triple final fallado por Okobo y firmaba cuatro tropezones en sus últimos cinco compromisos continentales.

El choque arrancó con un triple de Rokas Giedraitis pero el espectáculo lo ponían Granger asistiendo y Enoch colgándose del aro. Lo malo es que los de Spahija se cargaron muy rápido de faltas personales. Fue un cuarto de intercambio de canastas y de igualdad en el luminoso (9-11, min. 6). Dos canastas in extremis de Matt Costello dejaron el marcador en empate a 19 tras los diez primeros minutos de partido. La vuelta del estadounidense ha supuesto un claro punto de inflexión.

Jones azotó con intensidad la canasta rival (12 puntos en los primeros 11 minutos) y Gist, a lo suyo, también percutía. Okobo tenía acciones de playground pero tampoco hizo mucho daño a los vitorianos. En líneas generales, estuvo muy bien defendido. Pero el Bitci encajó 25 puntos en el segundo periodo, concedió bastante rebote y, aunque se fue con una buena anotación, no estaba haciendo un partido redondo. Llegó a ir 5 puntos arriba en el segundo cuarto pero se marchó al descanso con un 45-44. Para entonces, Baldwin llevaba 11 puntos, 2 rebotes y 14 de valoración.

La principal aportación ofensiva de los alaveses fue el estar fluidos en cinco contra cinco y no depender, exclusivamente, de la defensa, el rebote y correr. No se debe fiar todo al contraataque. Tres triples de Fontecchio colocaron el marcador en un 66-52 muy ilusionante. Al final del tercer periodo y el inicio del cuarto, Granger se unió a la fiesta con dos triples que estiraron la goma. Parker se equivocó con las rotaciones y lo acabó pagando caro.

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El parcial del tercer cuarto fue de 24-11 y el del último, de 22-11. En total, 46-22. A falta de 5 minutos para el final, el marcador era de 80-60 y a los vascos ya no se les escapó el partido. De hecho, la diferencia fue aumentando para sumar la quinta victoria de la temporada en Euroliga antes de viajar la semana próxima a Turquía. Giedraitis empezó a acertar con los triples y Lamar Peters, habitualmente negado en los tiros de campo, enlazó una canasta de dos con una diana de tres.

Toca volar a Estambul para enfrentarse al EFES el martes y al Fenerbahçe el jueves. Antes, derbi vasco ante el Surne Bilbao Basket (sábado, 20,45 h). Hay que buscar un nuevo triunfo para que no se escape la posibilidad de participar en la Copa del Rey de Granada. Posteriormente, habrá que cruzarse con el Betis, Breogán y Zaragoza. El ganar en Barcelona el pasado domingo abrió las posibilidades de clasificación para los de Neven Spahija. Además, Alec Peters y Sander Raieste se unirán a la competición dentro de poco.

91 - Bitci Baskonia (19+26+24+22): Granger (7), Baldwin (13), Giedraitis (15), Sedekerskis (2) y Enoch (14) -cinco inicial-, Lamar Peters (5), Fontecchio (15), Marinkovic (-), Costello (13) y Nnoko (7).

66 - Asvel Villeurbanne (19+25+11+11): Okobo (7), Jones (17), Knight (4), Wembanyama (10) y Gist (8) -cinco inicial-, Lacombe (5), Kahudi (6), Fall (6), Howard (3) y Strazel (-).

Árbitros: Mateu Boltauzer (Eslovenia), Michele Rossi (Italia) y Uros Obrknezevic (Serbia). Sin eliminados.

Incidencias: partido correspondiente a la decimocuarta jornada de la Euroliga disputado en el Fernando Buesa Arena de Vitoria ante 5.426 espectadores. La tormenta de Vitoria provocó goteras en un tiro libre y el chico de la mopa se convirtió en el héroe de la noche. Falló todo el sistema de comunicación telefónica digital y las radios tuvieron que hacer encaje de bolillos para sacar adelante las retransmisiones. Algo inaudito en pleno siglo XXI y con el precio que se paga por la instalación y mantenimiento de los RDSI.