"Sería absurdo que el Gobierno permitiese ahora el uso hotelero de la torre del puerto de Málaga", ICOMOS

Málaga

"El reconocimiento de la Farola como Bien de Interés Cultural es una magnífica noticia para Málaga y lo extraño es que no contase con esta declaración hasta ahora. Se salda una deuda que la sociedad española tenía con este edificio. A partir de ahora todo lo que se haga en el monumento y en su entorno será observado con mayor precisión", precisa en SER Málaga,  desde Icomos, el catedrático de Geografía Humana y experto en paisajes, Víctor Fernández Salinas.

"Es obvio: la construcción de un rascacielos junto a la Farola interfiere claramente en el entorno de un BIC. Existe desde 2017 una ley andaluza que puede aplicarse sin la menor duda en casos de contaminación visual de edificios protegidos. A lo que se añade, lo difícil de soslayar a partir de ahora la funcionalidad del faro", en referencia a que su linterna quedaría inutilizada si se levantase la torre de cien metros contemplada, lo que obligaría a instalar uno nuevo.

"El escenario es optimista para todos los que defendemos el patrimonio  paisajístico malagueño. Y ahora es necesaria la sensatez para repensar si debería edificarse esa torre de cien metros de altura en otro punto de la ciudad" reclama desde este órgano asesor

"Lo razonable es que el Gobierno no vaya a desdecirse y autorice ahora el uso hotelero del futuro rascacielos, proyectado junto a un edificio que acaba de proteger como BIC. Habrá que esperar a que el Consejo de Ministros se posicione y de ese último paso administrativo", concluye Fernández Salinas.