Bilbao

"Pero tú, ¿a qué juegas? ¡Qué difícil tiene que ser jugar con esto!". La primera reacción de Leo Messi al tener entre sus manos una pala de competición profesional tuvieron respuesta por parte de su compatriota Pablo Fusto. "Difícil es llevar la pelota pegada al pie a 50km/h como la llevas vos", respondió el palista.

La conversación entre ambos tuvo lugar el pasado jueves, durante uno de los entrenamientos que la Selección Argentina ha llevado a cabo en Lezama para preparar la Finalísima contra Italia. Messi estaba departiendo con Marcelino sobre la marcha del asturiano de Bilbao cuando ambos deportistas se encontraron.

Elogios a Scaloni

Messi destacó, de inicio, el papel de Scaloni al frente de la albiceleste. "Hizo hincapié en el grupo que tenían ahora, lo bien que estaban. Me llamó la atención para bien. Noté que estaba relajado, después de entrenar. Estaba cómodo. Y eso que dicen que no es de muchas palabras", relata Fusto.

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El jugador del PSG le preguntó a Pablo a qué jugaba. Este no dudó en mostrarle una de las palas con las que se desempeñan al máximo nivel en el frontón. "Él conocía los frontones que hay en Argentina, que son más pequeños. Allí se juega con pelota de goma. Cuando le dije que jugábamos con palas distintas a las que emplean allí, que son parecidas a las de pádel, alucinó con lo estrecha que es", explica.

Siete 'txapelas' para cada uno

La pala no es una cualquiera. Es con la que debutó Pablo Fusto, con la que dio los primeros golpes a una carrera en el frontón plagada de éxitos y que se prolonga hasta el día de hoy. Una pala con la que no volverá a jugar, que ahora lleva la firma del futbolista. Y es que en algo están igualados Fusto y Messi. El primero tiene siete txapelas del Campeonato Individual de pala; el segundo, siete Balones de Oro.